El suceso ocurrió cuando once trabajadores del primer y segundo turno se encontraban trabajando en el refuerzo de un muero de relleno en un taller de la capa conocida como "La Señorta" y se les vino abajo al ceder la red metálica de contención, quedando atrapados ocho de los trabajadores bajo los escombros, mientras tres consiguieron salir ilesos.

Los fallecidos son los picadores Manuel de la Cruz González, de 35 años, casado y con una hija; José Ramón Viejo Baragaño, de 41, casado y con una hija; Eduardo García Zapico, de 39, casado y con un hija; y el ayudante minero José Manuel Miranda Palacios, de 31 años y casado.

Dos de los heridos, que se encuentran ingresados en el ospital Central de Asturias, son el ayudante minero Francisco Javier Loredo Guiterrez, que presenta traumatismo torácico, y el maguinista de arranque, Dionisio Noveral Suárez, que tiene heridas en un brazo.

Los otros dos lesionados están en el hospital Valle del Nalón en Langreo y son el vigilante Lisardo Riera Riera, que presenta diversas contusiones, y el picador Juan Enrique Orviz González, con una herida amplia en la pierna y el brazo fracturado. Los cuatro heridos evolucionan favorablemente aunqu su pronóstico es reservados, según fuentes médicas.

El Director General de Hunosa, Ramón Madera, explicó que la capa donde se produjo el accidente se explota con rozadora y, por tanto, tiene el frente invertido, con lo que las franjas de avance van siendo posteadas y el relleno lo va soportando la tela metálica.

Agregó que se produjo un corrimiento del relleno hacia el frente del taller de 60 vagones de tierra que alcanzaron a los ocho trabajadores que había en la zona. Madera señaló que este tio de estructuras es muy corriente aunque hacía más de 20 años que no se producía un accidente de este tipo.

El hecho de que el accidente se produjera durante el cambio de relevo de la noche originó la confusión a la hora de saber cuántos trabajadores habían fallecido, así como sus identidades.

A la boca del pozo acudieron el presidente del Principado, Sergio Marqués, y los líderes de los sindicatos mineros asturianos que siguieron la evolución de las labores de rescate que se prolongaron hasta launa de la madrugada.

Con los cuatro fallecidos son ya 29 las víctimas que se han producido en la minería asturiana en lo que va de año. El último accidente ocurrido el 31 de agosto en el Pozo San Nicolás de Hunosa en la cuenca del Caudal en la que fallecieron 14 mineros a consecuencia de una explosión de gas grisu.