En conversación con Servimedia, Manuel cuenta cómo está viviendo en su puesto de trabajo estos días marcados por las elecciones y el volumen histórico de peticiones de voto por correo.

Repite en varias ocasiones que hay “mucha presión” para los trabajadores y también para los jefes. Sobre su trabajo, explica que se encarga de clasificar los paquetes y sobres y repartirlos y en un solo día ha llegado a hacer hasta 70 entregas. Su horario se está extendiendo más de lo habitual, ampliándolo por la tarde a causa de las elecciones. “Cuando sales con el carro cargado no puedes parar”, afirma.

En la tarea de repartir se encuentra con edificios sin ascensor. Su discapacidad, del 42% en su espalda a causa de varias hernias, le complica el reparto, pero se apoya en la gente joven a la que le tiene que hacer las entregas pidiéndole que baje si es posible a recogerla. Considera que se maneja “muy bien” tras una operación “difícil” y haber estado “a punto de quedarme en silla de ruedas”.

Para sobrellevar la “presión” de estos días, confiesa que duplica los analgésicos que se suele tomar. Pese a este volumen de trabajo por el voto por correo, al que se suma el reparto ordinario que debe seguir haciendo, se siente afortunado con su trabajo y resalta la “responsabilidad” que siente por hacerlo bien.

Como cartero lleva ejerciendo casi tres años y antes de recalar en la empresa postal se dedicaba a la construcción en una empresa familiar. Una caída desde un tejado interrumpió esa cotidianeidad. “El día que me dieron la discapacidad lloré porque me dijeron que no podía trabajar con mis hermanos” en la construcción, según relata. Tras someterse a una operación de hernia, “lo pasé muy mal y tardé mucho en encontrar trabajo”, recuerda. A través de un programa de inserción de personas con discapacidad en Salamanca llegó a Correos. Asegura que ha “renacido” y que hoy se siente “fuerte” pese a sus dolores.

En su oficina es la única persona con discapacidad y su jefe incluso “no se acuerda” de que la tiene al ver su disposición al trabajo. No quiere que sus compañeros se “compadezcan” por su discapacidad e intenta hacer todas las tareas, aunque reconoce que “a veces no puedes”.

VOTOS SIN RECOGER

Ahora, inmerso en el reparto del voto por correo, Manuel cuenta que tiene asignada una zona en la que un alto porcentaje de viviendas son de alquiler dado que es de estudiantes, han pedido el voto y se han marchado de vacaciones sin esperar a recibir la documentación, por lo que no ha podido hacer muchas entregas.

Estos votos quedarían perdidos y precisamente por este motivo Correos ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que acudiera a la oficina a recoger la documentación.

Mañana, domingo 23 de julio, los ciudadanos están llamados a las urnas para elegir nuevas Cortes Generales. La empresa pública postal comunicó el pasado miércoles que ya había entregado toda la documentación, a un día de que se cerrara el plazo para emitir el voto por correo -el jueves, 20 de julio, aunque finalmente se amplió al viernes-.

Los carteros de Correos han entregado en mano más de 2,3 millones de documentaciones electorales, muchas de las oficinas han ampliado el horario de atención abriendo el sábado y domingo de la semana pasada y se han formalizado 20.240 contratos de refuerzo, según la compañía. Esta operativa se ha visto envuelta en polémica por las críticas de los sindicatos por la falta de personal y la del PP hacia la dirección por la gestión, así como su petición de que se paguen las horas extraordinarias a los trabajadores.

PLANTILLA CON DISCAPACIDAD

Correos ya cuenta con 947 personas con discapacidad en plantilla, según figura en su página web.

Para acceder a la empresa pública postal, el grado de discapacidad a acreditar es igual o superior al 33%. En cada Oferta de Empleo Público (OEP) se reserva un 7% de plazas a personas con discapacidad, del que un 2% es para personas que acrediten discapacidad intelectual y un 5% para personas con otro tipo de discapacidad.

Correos también colabora tanto con fundaciones como con centros especiales de empleo y centros ocupacionales. Uno de los programas con los que trabaja es ‘Incorpora’ de la Obra Social de ‘la Caixa’, a través del que Manuel ha accedido a la empresa.

Correos tiene establecido un procedimiento específico de contratación para este colectivo, articulado con asociaciones especializadas en inserción laboral de personas con discapacidad.

También contempla un procedimiento específico dentro de las bases de la convocatoria para consolidar a las personas con discapacidad. Este procedimiento permite valorar individualmente y de una manera adecuada, las capacidades para obtener un contrato indefinido.