EL MEDITERRANEO RECIBE CADA AÑO MAS DE 600.000 TONELADAS DE PETROLEO, SEGUN GREENPEACE

MADRID
SERVIMEDIA

El Mediterráneo es el mar con mayor contaminación por hidrocarburos del mundo, ya que sus aguas reciben anualmente alrededor de 635.000 toneladas de petróleo procedentes de la operaciones de refinería, la limpieza de tanques y los vertidos intencionados o accidentales desde buques.

Estas son algunas de las afirmacionesque contiene el informe "Mediterráneo 92" elaborado por Greenpeace para presentar la campaña de este año destinada a salvar este entorno marino.

Los conservacionistas mantienen que la extracción de gas y petróleo es una actividad en expansión en el Mediterráneo, como los demuetran las 116 plataformas instaladas en Italia, Túnez, Libia, Grecia, España, Turquía y Egipto.

El documento asegura que un pozo que produce 1.000 toneladas de petróleo al día vierte unos 100 kilos al mar en el mismo periodo e tiempo, lo cual afecta al desarrollo normal de la fotosíntesis en las plantas, provocando un descenso en la productividad y en la abundancia de alimentos y envenena a los diversos organismos.

Además, considera los vertidos urbanos e industriales que soporta este mar, la esquilmación de sus recursos pesqueros y la desaparición de especies como los problemas más importantes que soporta este entorno.

Esta situación ha repercutido negativamente en las poblaciones de diversas especies, como la foca onje o el delfín listado, el común y el mular, que durante los últimos años han visto cómo su presencia en estas aguas ha quedado notablemente reducida.

Greenpeace ha decidido realizar un llamamiento a los gobiernos de los países ribereños para que frenen la tendencia de degración que predomina en el "Mare Nostrum".

Asimismo, ha presentado en los foros internacionales una propuesta de declaración de este mar como zona protegida, que incluye su desnuclearización, y sugiere las medidas que debe adotar cada país.

EL CASO ESPAÑOL

En el caso de España, la organización ecologista solicita a las administraciones competentes que elaboren planes de reducción de los vertidos a los ríos y costas del Mediterráneo, que contemplen la desaparición de los mismos para el año 2000.

También exige el cierre de las centrales nucleares, prohibir la entrada de buques propulsados con reactores nucleares o que transporten armamento nuclear a los puertos españoles, paralizar los proyectos de plantas incineradors de residuos tóxicos y urbanos, la adopción de medidas adecuadas para conservar los recursos marinos y exigir el estricto cumplimiento de la legislación pesquera.

Finalmente, solicita una reducción del 30 por ciento en las emisiones de CO2 para el año 2000 y la paralización inmediata y total de la producción de CFCs y otras sustancias destructoras de la capa de ozono.

A juicio de Greenpeace, "es necesario redoblar el esfuerzo para defender el Mediterráneo, porque si continúan las tendencias actules de crecimiento demográfico e industrial de la región, la degradación de los ecosistemas marinos puede ser irreversible".

(SERVIMEDIA)
23 Abr 1992
GJA