La encuesta, facilitada a Servimedia, indica que en ningún país es tan alto el temor a resultar afectado por un siniestro laboral. España supera incluso a Grecia, donde el 49 por ciento reconoce su miedo a un accidente, y a los cinco "lander" que forman la antigua Alemania Oriental, con un 48 por cien.

El miedo a un siniestro lboral es reconocido por una media del 40 por ciento de ciudadanos comunitarios. Los que se siente más seguros son los daneses (29 por ciento), los holandeses (30 por cien), los irlandeses (35 por cien) y los británicos (36 por cien).

El contraste es aún mayor por sectores, ya que un 67 por ciento de los trabajadores comunitarios empleados en la construcción se consideran en peligro de accidente, proporción que desciende hasta el 13 por cien en el sector financiero.

Otros sectores en los que los ecuestados mostraron un elevado temor a sufrir accidentes o lesiones son los de agricultura y pesca (62 por ciento), las empresas de energía y químicas (51 por cien) y el transporte (50 por cien).

Además, un 41 por ciento de los trabajadores españoles aseguró que su actividad profesional afecta a su salud, criterio que comparte prácticamente la misma proporción de sus homólogos comunitarios, el 42 por cien.

Los más preocupados por los efectos de su trabajo en la salud personal son los griegos (57 or cien), en tanto que quienes se muestran más confiados son los irlandeses (31 por ciento), los belgas (35 por cien) y los italianos (36 por cien).

NIVEL DE PREPARACION

Por otra parte, el 74 por ciento de los trabajadores españoles encuestados aseguran que conocen a algún responsable de seguridad laboral en su lugar de trabajo, si bien sólo un 25 por cien afirma haber participado él mismo en un curso sobre la materia.

La falta de conocimiento que se desprende de este dato sólo es superada por recia, Portugal, Italia y la antigua República Federal de Alemania, mientras que la proporción de participantes en cursos de seguridad alcanza el máximo del 46 por cien en la ex Alemania Oriental.

Sin embargo, el 58 por cien de los españoles dice que ha tenido ocasión de hacer sugerencias para mejorar la seguridad en su trabajo, un nivel que demuestra una mayor iniciativa que la media comunitaria, del 55 por ciento.

Entre los trabajadores comunitarios, predomina la idea de que el principal responable de garantizar la seguridad en el trabajo es la empresa, idea que comparten el 64,5 por cien de los encuestados.

Del resto, un 22 por cien opina que la responsabilidad principal recae en el propio trabajador, un 12,1 por cien dice que en el Gobierno y un 1,4 por cien señala a la Comunidad Europea.

Aunque son conscientes de las limitaciones de la CE en este terreno, el 86 por ciento de los españoles cree que la legislación comunitaria sobre higiene y seguridad en el trabajo mejorará sus condicones laborales.