LAS ORGANIZACIONES DE CONSUMIDORES ADVIERTEN DE LA BAJA CALIDAD DE LOS PREPARADOS CONGELADOS
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Los alientos precocinados congelados, cuyo consumo ha aumentado notablemente en los últimos años por su fácil preparación, ofrecen una baja calidad y en muchos casos defectos significativos en el peso y la higiene, según un estudio realizado por las organizaciones de consumidores UCE, ASGECO, CECU, FUCI y UNAE, que analiza 22 marcas de seis productos de este tipo.
Las marcas estudiadas son las de calamares "La Cocinera", "Findus", "Frudesa" y "Pescanova"; los palitos de merluza "Frudesa", "Delfín", "Pescanov" y "Gelnova"; las gambas "Frinca", "Macrocina" y "Gatergel"; los San Jacobo "La Cocinera", "Gelnova", "Pryca" y "Findus"; las croquetas de jamón "Pescanova", "Frudesa", "La Cocinera" y "Macrocina", y el pollo empanado "La Cocinera", "Findus" y "Freisa".
De acuerdo con este estudio, la comodidad a la hora de cocinarlos es la única ventaja de los productos preparados congelados, ya que "la calidad no es precisamente su punto fuerte". El consumo de este tipo de productos en España se estima en unos treskilos por habitante y año.
Las mayores deficiencias se detectan en la calidad higiénica de estos alimentos. El estudio asegura que sólo la mitad de los productos analizados tienen una calidad higiénica completamente correcta, mientras que los otros once presentan algún tipo de contaminación.
Según el estudio, algunos alimentos, como es el caso de los palitos de merluza "Pescanova", las croquetas de jamón "Macrocina" y el pollo empanado "Freisa", presentan índices de contaminación por encima de lo permitidos, si bien estos microbios desaparecen al freir el producto.
Hay un caso especial, el de los palitos de merluza "Gelnova", que fabrica y distribuye Alcampo, que tiene unos niveles de contaminación ajustados a los límites, pero que una vez fritos todavía presentan bacterias, aunque en muy pequeña cantidad.
Por ello, las organizaciones de consumidores que han elaborado el estudio recomiendan que los alimentos precocinados congelados se cocinen sin descongelar, porque si no, los microorgansmos pueden aumentar rápidamente y sobrevivir al tratamiento culinario.
RESIDUOS DE METALES
Además, otros dos preparados, los calamares "Pescanova" y "Frudesa", dieron positivo en la prueba de residuos de metales, con niveles de plomo "algo altos". El estudio señala que aunque este dato no es alarmante, debería ser controlado.
El informe critica también la mezcla de alimentos utilizada en algunos casos para la elaboración este tipo de productos, como es el caso de los San Jacobo o las croquetas que utilizan como materias primas el magro de cerdo o el fiambre de jamón, dos productos que pertenecen a la categoría más baja de la carne de cerdo.
Según el estudio, tampoco se puede decir que los alimentos precocinados congelados sean muy naturales, ya que en su lista de ingredientes aparecen gran cantidad de aditivos. Sin embargo, sus características organolépticas -sabor, olor, aspecto y textura- son adecuadas en todos los preparados.
Además de en la calidad, el informe destaca también defiiencias en el peso real del producto, inferior al declarado en la mayoría de los casos, y en el etiquetado, ya que aunque es correcto en general, algunas marcas no incluyen de forma completa las instrucciones de conservación.
En resumen, las cinco organizaciones de consumidores consideran que los alimentos precocinados congelados ofrecen una calidad general "sólo aceptable", además de tener un alto valor energético después de fritos. Por ello, recomiendan que los rebozados se elaboren en casa, ya que así se sabrá siempre qué tienen y cómo están preparados".
(SERVIMEDIA)
30 Oct 1992
NLV