Núñez se pronunció en estos términos desde Guadalajara, ante las aproximadamente 1.000 personas que −según la organización− se reunieron para seguir el acto de presentación del programa electoral de cara a los comicios autonómicos y municipales del 28 de mayo y que clausuró el presidente nacional del PP y líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo.

“Ganar un futuro mejor solo depende de nosotros, nadie nos lo va a regalar y a nadie se lo deberemos”, trasladó Núñez, incidiendo en que su pretensión es lograr “un cambio sereno, un cambio tranquilo y un cambio desde el rigor y la gestión”. “Será un proceso imparable a la vez que tranquilo y basado en la moderación y el entendimiento”, especificó.

Núñez aseguró tener claro que no va a “aceptar chantajes ni de unos ni de otros que pretendan someter nuestra voluntad, nuestro pensamiento o nuestra ideología”. “Nosotros no somos así”, destacó, asegurando que no cederá “simple y llanamente” por hacerse con el poder tras la cita con las urnas del 28-M.

Al hilo de estas reflexiones, definió al suyo como un “partido de mayorías, ganador, de gobierno y el que mejor defiende los intereses de la gente”. “Nuestro gran reto no es otro que expulsar a Pedro Sánchez y sus socios de las instituciones que tanto están dañando con unas nefastas políticas y acuerdos para nuestro país”, avisó.

Por eso, concibió el 28-M como ese momento para “iniciar el cambio de la regeneración democrática del país”. “Para ganar a Pedro Sánchez primero hay que ganar a Emiliano García-Page. Ese es el camino clave para echar a Sánchez del Gobierno”, enfatizó el candidato del PP a la Presidencia de Castilla-La Mancha.