Al acto están invitados los hijos de los representantes diplomáticos de más de 20 países, que recogenrán el diplona en nombre de los premiados. También asistirán escolares españoles y sus profesores.

Los cuatro premios extraordinarios fueron concedidos a la niña uruguaya Natalia Fernández Coscia, a la escolar cubana Deborah Abella Roig, al joven poeta chileno, Chistian Basso y a la profesora mejicanaVioleta Alamilla.

Los organizadores recibieron este año más de 2.000 trabajos de escolares de España y de toda América Latina, según confirmó a Servimedia Joaquín Antuña, presidente de la asociación.

Los niños menores de 7 años participaron en un concurso de dibujo. Los estudiantes mayores de esa edad podían optar entre la modalidad de poesía y cartas.

La cuarta especialidad está dirigida a los profesores que presentaron experiencias educativas orientadas al mejor conocimiento de los dos coninentes.