Así, la PMP valoró “muy positivamente” las acciones propuestas por la Comisión Europea, que instan a aumentar la oferta y la combinación de servicios profesionales de cuidados de larga duración (asistencia a domicilio, asistencia de proximidad y atención residencial).

La estrategia también implica garantizar criterios y normas de alta calidad para los prestadores de cuidados de larga duración. Esto incluye el apoyo a los cuidadores informales, que, a menudo, son mujeres y familiares de los receptores de cuidados, a través de la formación, el asesoramiento y el apoyo psicológico y financiero.

Para mejorar las condiciones de trabajo y atraer a más personas al sector asistencial, la estrategia recomienda a los Estados miembros que promuevan la negociación colectiva y el diálogo social con vistas a mejorar los salarios, las condiciones de trabajo y la formación profesional en dicho sector.

Además, por su parte, la Comisión estudiará la creación de un nuevo diálogo social sectorial para los servicios sociales a escala de la UE; promoverá el establecimiento de una asociación en materia de capacidades en el marco del Pacto por las Capacidades para el sector de los cuidados de larga duración, y revisará la aplicación de las normas de la UE que rigen las condiciones de trabajo, entre otras acciones.