Estos premios están impulsados por la Asociación Tutelar Aragonesa de Discapacidad (Atades), el propio club Inclucina y la asociación Hostelería de España, y su madrina es la chef Elena Arzak.

Desde el club Inclucina subrayaron en un comunicado que “los estudiantes con discapacidad intelectual tienen sitio en las cocinas”. Elena Arzak defendió la importancia de estos galardones “para que den rienda suelta a su imaginación”.

Asimismo, la embajadora del Club Inclucina, Lourdes Plana, destacó que el objetivo final de esta iniciativa es “el desarrollo profesional de estudiantes de cocina con discapacidad intelectual de forma reglada” con el fin de favorecer “su inserción profesional en empresas de hostelería”.

DINÁMICA DEL PREMIO

A estos Premios Inclucina podrán concurrir los alumnos con discapacidad intelectual más aventajados. Los centros formativos son los que presentarán a sus candidatos, que tienen que ser mayores de edad, además de estar cursando o haber realizado formación profesional reglada de cocina en escuelas de hostelería y centros públicos, privados o concertados de todo el territorio nacional.

En una primera fase, todos los participantes “deberán reinterpretar la misma receta” que recibirán junto con instrucciones. Además, tendrán que presentarla en forma de video-receta, acompañada de la ficha técnica de ejecución.

Entre todos los participantes, un jurado formado por reconocidos cocineros de todo el país seleccionará a los doce candidatos que pasen a la final que se celebrará el próximo mes de en diciembre en Zaragoza.