Una vez aprobado formalmente el acuerdo tras cinco horasde debate interno de la Presidencia Federal de IU, Frutos aseguró en rueda de prensa que no ha habido "ningún enfrentamiento" entre él y Anguita durante todo el proceso de negociación, ni siquiera una llamada telefónica del aún coordinador general "para estirarnos de las orejas y decirnos que cuidado".

Simplemente, puntualizó, Anguita ha recibido información "precisa y fluida" de la marcha de las conversaciones como líder orgánico de la coalición, y él "ha dado su opinión" en cada momento.

Más alá de los puntos concretos del acuerdo alcanzado por ambas formaciones, Frutos subrayó que IU "ha demostrado que está presente, que es una fuerza política de carácter estatal que tiene un programa propio" a partir del cual ha sido capaz de negociar y llegar a acuerdos con otras fuerzas, en este caso el PSOE.

Frutos precisó en este punto que la existencia de un acuerdo común de Gobierno para el caso de que PSOE e IU obtengan la mayoría no significa que la coalición renuncie a sus convicciones y que no hya, por tanto, "diferencias en temas importantes".

Así, reiteró que los miembros de IU "no estamos de acuerdo en el pacto de estabilidad" y "no compartimos la defensa de la OTAN. Continuamos defendiendo una política de seguridad y defensa europeas estrictamente políticas que partan del principio de que los problemas se solucionen políticamente y que, en caso de que tenga que utilizarse algún elemento coercitivo, sea en última instancia y además con el visto bueno de las instancias democráticas internaionales".

Sin embargo, precisó que esta postura, mantenida en el programa electoral de IU, no es óbice para defender también en la campaña electoral las aproximaciones a las que se ha llegado con el PSOE para acordar un programa común de Gobierno aplicable si ambas fuerzas obtienen la mayoría parlamentaria.

"RESPETO Y NO ABSORCION"

Según explicó Víctor Ríos, ambas fuerzas han encontrado una fórmula para expresar esta circunstancia en su acuerdo, al distinguir entre las "convicciones" de cada un y sus coincidencias plasmadas en un programa común.

Frutos insistió en que el acuerdo alcanzado permitirá avanzar al conjunto de la izquierda y a IU, al dejar claro que en España la izquierda es plural y su relación "debe ser de respeto y no absorción. Ni laminación de una fuerza ni el ataque grosero no justificado en el terreno político".

Tanto Frutos como Ríos trataron de quitar hierro a las advertencias vertidas desde el PP contra este pacto. El candidato de la coalición consideró que estas "reocupaciones" demuestran "que estamos vivos" y ponen de relieve la necesidad de centrar la campaña en propuestas y no es descalificaciones.

Por su parte, Ríos ironizó con quienes dicen "que si se llegaba a un acuerdo entre el PSOE e IU nos saldríamos del uro, del euro, del mapa... No. Sabemos que estamos en el mapa. Estamos en Europa y el euro es la moneda única europea. No vamos a proponer un cambio de moneda porque hagamos un pacto", aseguró.

Frutos también se refirió a la aparente buena acogia que este acuerdo ha tenido en el PNV, y lo hizo recordando que el portavoz peneuvista, Iñaki Anasagasti, le ha comentado alguna vez que "los castigados somos los rojos y los nacionalistas. Será por eso".

Francisco Frutos concluyó que este acuerdo ha sido posible porque ambas fuerzas han cedido posiciones y han demostrado su voluntad negociadora, permitiendo que no haya "triunfos ni derrotas" de una de ellas sobre la otra. Especiales elogios tuvo para los negociadores de IU, al celebrar que hayan manenido la tensión adecuada entre el mandato de su dirección y las exigencias de cualquier proceso de negociación.