EL PSOE NIEGA QUE EL RESULTADO PUEDA LEERSE COMO UN CASTIGO AL GOBIERNO DE ZAPATERO MADRID, 8 (SERVIMEDIA)
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La dirección del PSOE negó hoy que el resultado de las elecciones al Parlamento Europeo pueda interpretarse como un castigo de los ciudadanos al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, y rechaza por ello consecuencias internas, como la cuestión de confianza que reclama el PP.
La Comisión Ejecutiva Federal del PSOE se reunió hoy para analizar ese resultado, con la asistencia del presidente del Gobierno y secretario general del partido, José Luis Rodríguez Zapatero.
En la rueda de prensa posterior, la secretaria de Organización, Leire Pajín, advirtió de que el PP "se equivocará" si hace de estas elecciones una lectura diferente a la que corresponde.
Si el PP quiere sacar conclusiones en clave interna y presentar una moción de censura, "que lo haga", dijo Leire Pajín, pero que no ponga el balón "en el tejado de enfrente".
El argumento de los socialistas para rechazar esa interpretación interna es que, si los ciudadanos hubieran querido aprovechar las elecciones europeas para infligir un castigo al Gobierno, "para cambiar alguna tendencia", la participación hubiera sido más alta.
Sin embargo, explicó, la participación se ha situado en los umbrales habituales de las elecciones europeas, y lo que ha sucedido es que el PP ha sido capaz de movilizar a su electorado "en mayor medida" que los socialistas.
Por ello, aseguró que hay "autocrítica" en el seno del partido, si bien Pajín aparcó los detalles a los estudios poselectorales que arrojen luz sobre el comportamiento de los electores.
Por el momento, Pajín rechazó vincular una parte de la abstención socialista al debate sobre el aborto, y dejó claro que el impulso de la reforma nada tenía que ver con un intento de movilización, sino con el cumplimiento de un compromiso del partido.
NO HAY "VUELCOS"
Pero esa autocrítica es para Pajín compatible con subrayar que a pesar de las dificultades por la crisis económica, el PSOE ha mantenido un "altísimo" nivel de respaldo y tiene una base "extraordinariamente sólida" que le permite ver un futuro "esperanzador".
La secretaria de Organización del PSOE se declaró convencida de que estas elecciones no han modificado el panorama político español y cada partido se ha mantenido en los territorios en los que gobierna con una tendencia "continuista", también en Madrid y Valencia.
Los socialistas no ven ningún "vuelco", tampoco en esos territorios, y en Cataluña destacan que los socialistas han superado en 15 puntos a la segunda fuerza y en 20 al PP, por lo que no cuestionan la campaña.
Por todo ello, Pajín dejó claro que los socialistas felicitan al PP como vencedor de la campaña, pero subrayó también la equivocación de quienes alimentaban el pronóstico de una "derrota espectacular" del PSOE.
En el conjunto de Europa, y también en España, los socialistas creen que las elecciones han estado marcadas por el "impacto de la crisis", ya que la cita con las urnas ha llegado en el momento "seguramente más duro", cuando muchos electores están directamente afectados y apenas se ven los "primeros síntomas de recuperación".
Además de la crisis, los socialistas creen que una parte de la abstención se debe a que los ciudadanos no otorgan "suficiente trascedencia" al Parlamento Europeo, y por ello avanzan que trabajarán para hacer valer su papel.
Lo harán, subrayó, en un Parlamento Europeo que tendrá una presencia "minoritaria, pero significativa" de los partidos de extrema derecha, lo que demuestra, apuntó, que el PSOE tenía razón al alertar en la campaña sobre determinados comportamientos con los que el PP "se dio por aludido".
Lejos de las lecturas internas que pretende el PP, Leire Pajín subrayó en un momento de su intervención que por delante hay dos años sin convocatorias electorales de ámbito nacional y, por tanto, comienza una etapa propicia para abordar los problemas del país "desde la serenidad, sin sectarismo".
El Gobierno dará "pasos decididos" en el diálogo social y abrirá "nuevos espacios de diálogo" con las fuerzas políticas, a partir de la confianza en que todos los partidos sean capaces de colocar los intereses generales por encima de los suyos.
(SERVIMEDIA)
01 Jun 2009
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