Según el escrito de conclusiones provisionales, el fiscal encargado del caso, Jesús Santos, Jon Crespo Ortega, Iker Lima Sagarna y Xabier Arrilucea Saiz, con la finalidad de colaborar con ETA, decidieron crear un grupo para perpetrar actos de violencia callejera o "kale borroka".

Así, en la noche del 3 de marzo de 2001, tras la adquisición y preparación de diversos cócterles molotov, se dirigieron encapuchados a la sede del diario "El Correo Español. El Pueblo Vasco" en Bilbao y lanzaron contra la fachada del rotativo varios cócteles molotov, tres de los cuales explotaron y provocaron el incendio de un toldo, además de daños en el edificio.

Los hechos fueron reivindicados de forma anónima por una voz que justificaba la acción contra el diario "por negar la soberanía de Euskal Herría".

Para el fiscal encargado del caso, Jesús Santos, los hechos descritos son constitutivos de un delito de daños terroristas por lo que procede imponer a cada uno de los acusados tres años de cárcel y diez de inhabilitación absoluta.