Pujol dice en el artículo, recogido por Servimedia, que, al igual que tras la aprobación del primer estatuto catalán de la democracia se generalizó en el resto de España el denominado "café para todos", ahora, cuando se quiere reformar dicho texto, se ha pasado a lo que, citando a García Añoveros, Pujol denomina "autonomía por arrastre", algo que, a su juicio, no beneficia a Cataluña, ya que se busca una homogeneización a la baja.

Este proceso "siempre ha sido bien visto por la Administración central, porque en la práctica ha representado un freno al autogobierno y a la afirmación de la identidad de Cataluña".

"Sin el reconocimiento de la personalidad diferenciada de Cataluña y sin la limitación de la solidaridad, no habrá un buen estatuto, sino todo lo contrario, será contraproducente", advierte el ex presidente de la Generalitat.

Pujol apeló directamente al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a quien emplazó a que tenga el valor de reconocer el hecho diferenciador de Cataluña y explicarlo a toda España.

Finalmente, el ex presidente de la Generalitat insistió en la injusticia que supone el hecho de acusar a Cataluña de insolidaria, "cuando sólo Cataluña ha sido capaz de añadir a su reivindicación cultural, lingüística, política e institucional su voluntad de contribuir al progreso y a la modernización de España".