El título de estas memorias se debe a la propia filosofía del cantante, quien señala que "a mí no me ha quedado ningún trauma de nada. Lo pasado pasó. Y siempre: mañana. Ayer para mí no existe, siempre pienso en mañana".

A lo largo de quinientas páginas, el artista de Linares evoca a las personas que más han marcado su existencia, como Francisco, su padre, un obrero e la construcción que "se jugaba la vida en el andamio por cuatro perras" o Paco Gordillo y Manuel Alajandro, personas fundamentales en su carrera musical.

Raphael explica el porqué de la 'ph' en su nombre ("alargaba la ortografía"), hace un repaso por el festival de Benidorm, el trampolín que impulsó su trayectoria profesional, así como su matrimonio con Natalia Figueroa.

La publicación de sus memorias coincide con su 35 aniversario en el mundo de los escenario con más de 50 millones de discos vndidos, 48 de platino, 325 de oro y actuaciones en los lugares más emblemáticos de todo el mundo, el Madison Square Garden, el Olympia y el Teatro de la Zarzuela, en donde escuchó la ovación más larga de su vida.