Uno de los avances más destacados del año es, según el Smithsonian Institution, entidad pública estadounidense dependiente del Gobierno federal, "el descubrimiento de que los caracoles manzana pueden regenerar completamente sus ojos tras sufrir una lesión, un proceso que se completa en apenas unas semanas". Según explica la publicación 'Smithsonian Magazine', órgano divulgativo de este instituto científico, los investigadores observaron que "estos animales no solo reconstruyen la estructura externa del órgano, sino también los tejidos internos y las conexiones nerviosas necesarias para recuperar la función visual".

Este fenómeno es "muy relevante", pues "ha permitido identificar genes y mecanismos celulares asociados a la regeneración, lo que abre nuevas líneas de investigación en medicina regenerativa". Las investigaciones publicadas por equipos científicos internacionales citados por Smithsonian señalaron que "comprender cómo estos organismos activan y controlan la regeneración podría resultar clave para el desarrollo futuro de terapias destinadas a reparar daños oculares en humanos, así como para avanzar en la regeneración de otros tejidos complejos".

Este instituto también puso el foco en el estudio del pelaje del oso polar, "cuya composición natural evita que el hielo se adhiera a su superficie incluso en condiciones extremas". De acuerdo con los investigadores, este hallazgo "podría trasladarse al diseño de recubrimientos industriales con propiedades antihielo y de aislamiento térmico más eficientes, con posibles aplicaciones en la aviación, el transporte marítimo o la construcción en climas fríos".

EL MODELO DE LAS COLONIAS DE HORMIGAS

Otro ámbito de interés es el comportamiento colectivo de distintas especies de hormigas, cuya capacidad para coordinarse y combinar fuerzas de manera altamente eficiente está siendo utilizada como modelo para el desarrollo de sistemas de robótica colaborativa. Según recogió la revista, estos estudios "permiten mejorar algoritmos de coordinación entre robots y optimizar tareas en las que varios dispositivos deben actuar de forma conjunta sin una dirección centralizada".

Junto a estos avances, 'Smithsonian Magazine' menciona investigaciones sobre "animales capaces de resistir altos niveles de toxicidad ambiental, así como estudios genéticos sobre especies de longevidad extrema, cuyos resultados podrían aportar nuevas claves para comprender los efectos de la contaminación y los procesos biológicos del envejecimiento".

Según concluyó la publicación, los descubrimientos científicos de 2025 refuerzan la importancia de investigar en Soluciones basadas en la Naturaleza (SBN) y profundizar en la idea de que "la observación de la naturaleza sigue siendo una fuente fundamental para el desarrollo de soluciones tecnológicas con impacto directo en la sociedad".