Según ha informado Repsol-YPF, la operación se realizará en dos tramos, una primera en la que BP-Amoco adquiere una "paquete" muy singnificativo de los activos por 500 millones de dólares que, añadidos a la venta del resto del campo gasista próximamente eleva los ingresos para el grupo petrolero español hasta cerca de 600 millones de dólars.

Con esta venta, Repsol-YPF se desprende de un campo con unas reservas de 34.000 millones de metros cúbicos de gas y una producción diaria de unos 6,6 millones de metros cúbicos, además de unos 25.000 barriles de petróelo.

La operación se inscribe en el plan de Repsol-YPF para reducir mediante desinversiones en activos no estratégicos para el grupo, el endeudamiento generado por la compra de la compañía petrolera argentina.

Repsol-YPF es propietaria del 59% del capital de Crescendo Resourcs, compañía dedicada a la explotación y producción de gas natural en el estado nortemaricano de Texas. El otro 49% de la empresa ya estaba en poder de BP Amoco, que ahora pasa a controlar el 100%.

El programa de desinversiones de Repsol-YPF tiene como objetivo obtener fondos por importe de al menos 2.500 millones de dólares entre 1999 y el 2000, aunque el objetivo de la compañía es acelerar dicho plan.