"Cada uno come y cena con quien quiera", dijo Rojo a Servimedia, "otra cosa es que los resultados de esas comidas nos vayan a vincular al resto. A mí no me vincula ninguna decisión ni acuerdo de ningún tipo de comida o de cena. Los acuerdos se toman en las instuticiones y en las direcciones de los partidos políticos".

Sobre el hecho de que sus compañeros accedieran a verse con Arzalluz, el dirigent socialista alavés dijo que "no se puede prohibir a nadie que coma y cene con quien quiera", aunque sugirió alguna intencionalidad en la filtración a los medios de comunicación del encuentro.

En este sentido, dijo que no puede entender "que, cuando uno hace una comida desde la discreción, al terminar esté en los medios de comunicación. Por tanto, alguna intencionalidad tendrán esas comidas y esas cenas por parte de quien filtra".

Asimismo, Rojo criticó la postura de Arzalluz, del que dijo que lasconclusiones de sus reuniones privadas suelen ser "bastante nefastos casi siempre" para el resto de los ciudadanos.

Racalcó que el presidente del PNV parece que trata de "suplantar" al "lehendakari", a los Gobiernos y a los partidos políticos con sus reuniones, y le instó a presentarse a las elecciones si quiere tener mayor protagonismo.