Según declaró Sala a Radio Nacional, la detención del ex director general es "un elemento esencial para el éxito de la investigación penal que está llevando a cabo la juez competente, por cierto con gran discreción y eficacia".

"Todas las resoluciones que puedan producirse, tanto en la fase de instrucción -que es la que está actualmente tramitándose- como en la fase plenaria ulteriormente, cuando, en su caso, se abra el juicio oral, todas esas resoluciones no debn nunca, a mi juicio, ser interpretadas en clave política, es decir, en función de a quién benefician o a quién perjudican, a qué opciones políticas benefician o perjudican, porque esto es tensionar políticamente la justicia, y además no gana nada la política, porque parece que se hace exclusivamente en los juzgados y tribunales, cosa que es indudablemente algo anómalo, algo que podría calificarse de patológico".

A su juicio, la correcta instrucción está asegurada, "por cuanto que se ha informado por l Consejo General del Poder Judicial favorablemente toda la petición de medios personales y materiales que ha realizado esta juez que lleva el caso".

Tras resaltar la discreción y eficacia demostradas por la jueza Ana Ferrer, instructora del caso, Pascual Sala dijo que hay que dejar actuar a la justicia, para no contribuir a aumentar el clima de desasosiego.