Así lo dijo Sánchez en los primeros minutos de su intervención en el Congreso, en la que aludió al dato avanzado del Índice de Precios de Consumo (IPC) difundido poco antes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y que situa la tasa anual en el 9,8%, 2,2 puntos más que la de febrero y el nivel más alto desde mayo de 1985.

“Es un mal dato que afecta a toda la economía y a nuestra sociedad. En particular a los más vulnerables", reconoció el presidente, para acto seguido señalar que "en un 73% el alza de los precios se explica por el desbocado precio de la energía. Y todo ello, exacerbado por la guerra de Ucrania".

Así las cosas, "estamos convencidos de que el plan nacional de respuesta y, sobre todo, el reciente acuerdo logrado en Bruselas para poner un precio de referencia al gas y evitar con ello su traslación al precio de la electricidad nos va a permitirá en los próximos tiempos doblegar la curva y estabilizar la evolución del coste de la vida·".

Sánchez lamentó la situación bélica desatada “precisamente ahora que el mundo estaba dejando atrás una pandemia y adentrándose en un periodo de recuperación económica”.

Una recuperación, dijo, que en el caso español se resume “perfectamente en dos cifras: 20,2 millones de empleados y un crecimiento en 2021 del 5,1% del PIB”, por lo que el presidente presumió DE que “España hoy crece y crea empleo”.

De ahí que, demandó, “nuestra obligación, la del Gobierno y también la del Poder Legislativo, es proteger el crecimiento y la creación de empleo frente al impacto de la guerra de Putin en Ucrania”.