Infancia

Save the Children alerta de que 260.000 adolescentes podrían abandonar prematuramente la ESO este curso

Madrid
SERVIMEDIA

Save the Children avisó este jueves de alrededor de 260.000 adolescentes podrían abandonar los estudios de ESO durante el curso escolar 2025-2026, lo que supone que cuando estos chavales tengan entre 18 y 24 años no habrán completado la segunda etapa de educación secundaria ni estarán formándose para alcanzar ese nivel educativo. Por ello, conminó a aplicar “medidas más contundentes” para reducir la tasa de abandono educativo temprano.

Lo hizo en un comunicado en el que, recurriendo a datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), reseñó que la tasa de abandono temprano (el porcentaje de jóvenes de 18 a 24 años que ha dejado los estudios sin haber obtenido al menos un título de Bachillerato o de FP) se sitúa actualmente en el 13%, un 8,3% menos que hace diez años y un 18,7% menos que en 2008; sin embargo, este guarismo apenas ha mejorado un 0,3% desde 2021.

Ante esta situación, la directoria de Influencia y Desarrollo Territorial de Save the Children, Catalina Perazzo, destacó su temor a que “la tasa se estanque en torno a ese 13% en los próximos años”. A pesar de “la evolución positiva” de los últimos años, España es el segundo país con mayor tasa de abandono escolar de la UE, cuya media es del 9,5%, sólo superado por Rumanía (16,6).

Ante la ‘vuelta al cole’, Save the Children puso de manifiesto que de los dos millones de adolescentes que cursarán la ESO este curso, cerca de 260.000 abandonarán los estudios de forma temprana, “si no se trabaja para que se reduzca la tasa de abandono educativo temprano”.

A juicio de Catalina Perazzo, “esta situación es una anomalía” y abundó en el hecho de que “resulta inaceptable que esta situación se mantenga, con el riesgo incluso de estancarse o ir a peor, si no hay un verdadero compromiso político a nivel nacional, autonómico y local”.

La entidad explicó que “existe una correlación directa entre la pobreza y el abandono escolar”, puesto que “en los hogares más vulnerables se dan grandes dificultades para el acceso a recursos educativos básicos como libros, gafas o ropa, así como a actividades extraescolares, lo que afecta directamente al rendimiento y permanencia escolar”.

Esto le sirvió para exponer que “los jóvenes con mayores tasas de abandono educativo presentarán en el futuro una situación laboral más vulnerable, con mayores tasas de paro y más tiempo buscando un empleo, así como salarios más bajos, lo que desemboca en menores niveles de satisfacción con la vida”.

Por todo ello, Save the Chilren llamó a poner en marcha un índice de vulnerabilidad que “pueda servir para financiar adecuadamente las escuelas con mayores necesidades o la asignación de recursos a las familias en vulnerabilidad”.

También consideró conveniente la promoción de la formación del profesorado en educación inclusiva o la reducción de la repetición del curso a “casos muy excepcionales”, como un “retraso madurativo significativo”, “ausencias prolongadas por motivos médicos o personales” o “dificultades graves de aprendizaje no superadas con refuerzo”.

Teniendo en cuenta que la población migrante presenta unas tasas de abandono escolar más elevadas, la organización observó que es “fundamental y beneficiario para el conjunto del alumnado”, la entidad reclamó aprobar medidas para “acabar con la segregación escolar, evitando criterios de admisión potencialmente excluyentes, garantizando la gratuidad de todos los centros sostenidos con fondos públicos, y ofreciendo información fiable sobre los procesos de admisión a las familias más vulnerables”.

Por último, y puesto que hay comunidades, como País Vasco y Cantabria, por debajo de la media europea en tasas de abandono escolar, y otras, como Baleares y la Región de Murcia, por debajo, Save the Children convoco al Gobierno y a los territorios a que “trabajen de forma coordinada para atajar el problema”.

(SERVIMEDIA)
04 Sep 2025
MST/pai/mag