"Tan prontocomo un producto es eficaz, el ministerio lo va a utilizar, pero cosa distinta es que habrá que hacer un uso racional que evite un gasto desorbitado y sobre todo no justificado", indicó Castellón, quien explicó que un enfermo de sida cuesta al Estado "varios millones de pesetas".

El subsecretario del Ministerio de Sanidad aprovechó su paso por la UIMP en Santander para explicar que el plan de choque diseñado por su departamento para rebajar las listas de espera hospitalarias está a la espera de la conlusión del sistema de información fiable para medir su aplicación, que estará finalizado en pocas semanas.

"En el momento en el que se tenga este elemento clínico para poder empezar, se iniciará el trabajo, aunque en cualquier caso el plan será más intenso cuando se pasen las vacaciones de verano", indicó.

En cuanto a la aceptación del plan por el colectivo médico, Castellón aseguró que "siempre hay personas interesadas en este tipo de actividad extraordinaria", por lo que a su juicio no existirá problemas.