“Por supuesto”, respondió escueta pero nítidamente cuando, en una entrevista en TVE recogida por Servimedia, se le preguntó directamente si consideraba de esa manera las acciones con las que ese movimiento protestó contra la condena judicial a los dirigentes del Procès en 2019. “Es obvio que no ha habido una cuestión de violencia que se esté asociando a todo eso”, había dicho ya poco antes.

Por lo demás, Rego no quiso pronunciarse sobre el procesamiento del expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont por terrorismo como supuesto cabecilla de Tsunami, que ayer acordó la Sala Segunda del Tribunal Supremo, y prefirió distinguir que “hay un carril, un espacio que tiene que ver con el trabajo de la justicia” y otro distinto por el que “corresponde seguir insistiendo desde el Gobierno en dar una salida política a un conflicto que es imprescindible resolver desde lo político y desjudicializar”.

La ministra insistió en abogar por que en Cataluña “se desarrolle la política para promover un marco de convivencia”, con la ley de amnistía como hito principal, y en concentrarse en que “la negociación vaya bien” y la norma “salga adelante”. En ese sentido, dijo que le “consta” que “se está trabajando en ello de una manera contundente” y que hay “voluntad firme para encontrar esta solución política” y llegar a un acuerdo respecto a la amnistía.