La construcción está subvencionada en el marco delPlan Industrial y Tecnológico Medioambiental (Pitma) y constituye el paso previo al montaje de una gran planta de eliminación del ácido clorhídrico, que resulta dañino para el medio ambiente.

Con esta iniciativa, la empresa que la promueve pretende adaptarse a la normativa comunitaria en materia conservacionista, algo a lo que están obligadas todas las industrias españolas.

La Administración central estima que las empresas nacionales deberán invertir alrededor de 1,2 billones de pesetas durante ls próximos años para permanecer dentro del marco jurídico de la CE.

Según los datos del Gobierno, los sectores que deberán hacer un mayor esfuerzo son el químico y el energético, que en conjunto tendrán que soportar el 70 por ciento de las inversiones necesarias.

Al sector de la automoción le corresponderá un 9 por ciento, al de la minería un 6, a las básicas el 5, a la construcción el 4, a la téxtil y curtición el 3, y el 3 por ciento restante corresponde a otras no especificadas.

Respecto l reparto por fases de la inversión, se prevé que el 45 por ciento se dedique a la adquisicón de bienes de equipo, el 25 a obra civil, el 20 al licenciamiento o modificación del proceso y el 10 por ciento a la ingeniería.