De acuerdo con dicho estudio, los soldados españoles perciben como sueldo durante la prestación del servicio militar el 1,8 por ciento del salario mínimo interprofesional, ocupando el último lugar tras los de la República Checa, que cobran el 7%; los de la República Eslovaca, con el 8,3%; y los portugueses, a los que el Estado les paga el 14,2%. Los soldados de Holanda, por el conrario, son los que más perciben, un 85 % del salario mínimo interprofesional.

También los soldados españoles son los que más horas trabajan a la semana, ya que su horario es ilimitado, al igual que en la República Checa, mientras que en la República Eslovaca trabajan 56 horas y los de Eslovenia y Suecia, 50 horas. Holanda también ocupa la primera posición en menor número de horas semanales trabajadas, que suman 38.

Aunque España no es, en cambio, el país en el que la "mili" dura más tiempo, ya qu ocupa el cuarto lugar con 9 meses, tras Portugal, donde dura 4, Eslovenia, donde es de 7 meses, y Suecia, en donde oscila de 7,5 a 10 meses, sí es también donde los mozos descansan menos días al mes, con 1 ó 2, siendo superados por los checoslovacos, que tienen 3 días de descanso, por los eslovacos, con 4 días, y por Holanda y Suecia, donde disfrutan de 10 días

Respecto a los accidentes durante el servicio militar, España también ocupa una primera plaza de los países europeos, ya que mientras que en inamarca o Finlandia mueren anualmente unos 5 soldados, en 1991 murieron en nuestro país un total de 200 jóvenes. La ODS achaca este elevado número de víctimas a numerosas causas imputables al servicio militar y que las autoridades no mejoran, según indicó el director de la oficina, Francisco Castañón.

La ODS también denuncia en el estudio que el Ministerio de Defensa español fomenta que los soldados de reemplazo efectúen tareas que no guardan relación con las actividades militares que, en ocasiones, ayan "la vejación y el esclavismo", no teniendo derecho a negarse a realizarlas, en contra de lo que ocurre en el centro y norte de Europa.

Asimismo, señala que en la mayoría de los países del centro y norte de Europa los soldados son enviados a un destino lo más cercano posible de su domicilio, concediendo importantes beneficios sociales a los que son destinados lejos de sus casas. En España, dice la ODS, el Ministerio de Defensa "únicamente ha conseguido levantar falsas expectativas" con la "mili a a carta" y con la asignación de destinos mediante sorteo informático, que la oficina denomina "Tongo-loto".

FALTA DE LIBERTAD DE EXPRESION

Otros aspectos de la "mili" española criticados por la ODS son la falta de derecho a la intimidad de los soldados, que pueden ser registrados sin mandato judicial; la ausencia de los derechos de reunión, libertad de expresión y asociación; la permanencia de una jurisdicción militar en la que el ejército "es a la vez juez y parte", de los arrestos disciplinarios yde la pena de muerte en caso de guerra

A juicio de la ODS, estas condiciones explican el número "imparable y contínuo" de objetores de conciencia, 4.000 en España al año frente a 4 en Holanda, y de insumisos quienes, a su juicio, deberían condecorar al Ministerio de Defensa por haber sido "el mejor agente de la insumisión en nuestro país".

Marc Hulst, secretario general de ECCO, explicó, por su parte, que el Programa de Emergencia del consejo, organización que tiene carácter consultivo, recoge alunos preceptos incluídos en la Carta Social del Soldado y tiene como finalidad mejorar la situación del servicio militar del sur de Europa, donde las condiciones de prestación de la "mili" son inferiores a las de los paises del norte.

En ese documento, que será remitido a todos los ministerios de Defensa del sur de Europa, el consejo considera que el soldado debe ser reconocido como un trabajador temporal del Estado y debe tener los mismos derechos que los civiles, exceptuando el de huelga, entre otro aspectos.