Según el Supremo, el accidente se produjo por la falta de medidas de seguridad, cuando e trataba de un trabajo de claro riesgo, que pudo haberse evitado en gran medida si la empresa hubiese tomado las precauciones necesarias.

El Alto Tribunal relata que la obra no disponía de los suficientes puntos y elementos de seguridad para el enganche de cinturones y para facilitar de este modo el desplazamiento seguro de los operarios por el tejado. Añade que la empresa sólo adoptó las medidas de seguridad pertinentes después del accidente por el que ha sido condenada.

Además, el Supremo señaa que "no medió prohibición expresa, y menos control adecuado, para que (el accidentado) no ralizara los trabajos más allá del ámbito que permitía el anclaje del cinturón, teniendo en cuenta que se trataba de realizar actividades que exigían movilidad sobre la cubierta".

El Alto Tribunal sostiene que la empresa condenada no impartió instrucciones al trabajador para que sujetara el cinturón a los elementos estructurales del edificio, donde no existieron medidas de seguridad "o resultaron insuficientes"

De esta forma, el Alto Tribunal ratifica la sentencia de la Audiencia Provincial de Bilbao que condenó a Cubiertas Begoña S.L. a pagar 7 millones de pesetas al accidentado.