LAS TARIFAS INTERNACIONALES DE TELEFONICA BAJARAN ESTE AÑO, SEGUN VELAZQUEZ

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de Telefónica, Cándido Velázquez, reconoció hoy en el Congreso que las tarifas internacionales de la compañía son demasiado caras y aseguró que propondrá su disminución para e presente año.

Velázquez, que intervino en la Comisión de Industria de la Cámara Baja, dijo que "no tiene ni idea" de cual será la propuesta de tarifas de la compañía para este año, pero adelantó que "en el momento en que se haga, habrá que sugerir una disminución de los precios en las llamadas internacionales que, ciertamente, son excesivas en relación a los costes".

Con estas afirmaciones, el responsable de Telefónica asumió las críticas de la Oficina Europea de Asociaciones de Consumidores (BEC), cuyos estudios de mercado revelan que los españoles e italianos pagan las tarifas más altas de la CE por hacer llamadas internacionales, y que una comunicación de Madrid a Londres cuesta un 33 por cien más que si se hace a la inversa.

Sin embargo, Velázquez no quiso pronunciarse sobre la cuantía de las subidas que podrían registrar en 1992 las llamadas urbanas e interurbanas, y se limitó a decir que en el primero de los casos "ocurre todo lo contrario a las internacionales".

En este sentido, ndicó que los precios del servicio urbano deberán subir hasta homologarse a la media de la CE en 1996, debido a que sus costes son superiores a las tarifas que abona el consumidor y la normativa comunitaria no permitirá trasladar costes de un área de negocio o otra.

La homologación con la media comunitaria exigirá, con toda probabilidad, subidas anuales sensiblemente superiores a la inflación para este tipo de llamadas, ya que actualmente sólo en Grecia y Portugal son más baratas.

Respecto a las lamadas interurbanas aseguró que mantienen una relación adecuada entre el coste y la tarifa y que, por tanto, no será necesario someterla a al proceso de adaptación de precios que deberá acometer la compañía antes del 96.

Por otra parte, Velázquez señaló que el contrato recientemente firmado por Telefónica con el Estado obliga a la compañía a un cambio de mentalidad, inspirado en los principios de competitividad, eficiencia y calidad.

En el turno de portavoces, el Partido Popular se quejó de que l citado contrato se haya firmado con tres años de retraso sobre lo previsto, mientras que Izquierda Unida expresó su temor ante la futura evolución de las tarifas telefónicas.

(SERVIMEDIA)
26 Feb 1992
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