En la actualidad, una llaada desde España al extranjero cuesta mucho más de su valor real, porque se mantienen "subsidios cruzados" que penalizan este tipo de servicio frente a otro más demandado, como son las llamadas urbanas e interurbanas.

Esos subsidios, que acabarán "en un plazo de tiempo corto", según asegura el Gobierno, generan márgenes de beneficios que aprovechan los revendedores de material con el negocio montado alrededor del de Telefónica.

"De hecho", dice el Ejecutivo, "al igual que Telefónica, todas las opradoras europeas: Britsh Telecom, France Telecom, Deutsche Budespost Telekom, etc, han bajado y van a bajar más todavía sus tarifas internacionales".