El responsable de Medios de Comunicación de Arthur Andersen, Angel Durández, destacó, en rueda de prensa, que el telespectdor será cada vez menos pasivo y pasará de un mercado de oferta a un mercado de demanda.

El estudio, realizado a partir de una encuesta hecha a 25 altos directivos del sector, subraya, asimismo, que el eje de la actividad comercial del sector no será tanto el logro de la venta de los contenidos disponibles como la satisfacción de las demandas del público.

Durández comentó que la multiplicación de canales temáticos en el futuro aumentará los niveles de competencia, al mismo tiempo que se produe un mayor grado de concentración.

Añadió que la competencia se plantea sobre tres elementos: tiempo que los ciudadanos emplean en ocio, el presupuesto doméstico de gasto en productos de servicios audiovisuales e Internet y la capacidad de captar inversiones publicitarias y nuevas formas de comunicación comercial.

Finalmente, resaltó que la proporción de inversiones publicitarias destinada a soportes audiovisuales se mantendrá a pesar del aumento del número de canales, y que todos los expertos espran que en el período 2000-2005 se defina un estatuto claro sobre la financiación, los contenidos y el gobierno de la televisión pública.

Por su parte, el decano de la Facultadad de Ciencias de la Comunicación, Alfonso Sánchez, dijo que la lucha frenética de las televisiones por alcanzar los mayores índices de audiencia hacen necesario abrir un período de reflexión.

En este sentido, comentó que el futuro de la televisión está en la globalización, en un descenso de los precios de los canales d pago y su reubicación frente a la competencia que supone Internet. En su opinión, el desarrollo de la Red no afectará a la televisión en cuanto su publicidad, pero sin en cuanto al número de espectadores.

Finalmente, Sánchez tambiénresaltó el esfuerzo que realizarán las televisión para satisfacer las demandas del público, que "pasará del menú del día a comer a la carta" a la hora de ver televisión.