En una carta remitida por Leblanc a la vicepresidenta de la fundación, Ana María Vidal Abarca, el responsable de la ronda ciclista gala expresa su "profundo respeto y solidaridad" hacia la institución ue preside Adolfo Suárez, y dice sentir una "sincera simpatía" hacia las víctimas del terrorismo.

El director del Tour señala que comprende "la indignación que ha podido provocar esta noticia en la opinión pública española", y apunta, al respecto, que la dirección de la carrera ciclista "ha sido víctima de una manipulación de la que hemos sido conscientes demasiado tarde".

"Como puede imaginar", dice Leblanc a Vidal Abarca, "la dirección del Tour de Francia condena firmemente la violencia a la qu ETA recurre desde hace años y no desea en ningún caso que se pueda considerar que el Tour, su dirección y yo manifestamos la más mínima benevolencia hacia los que mantienen lazos con una organización criminal. Todo el equipo de organización del Tour es unánime sobre este punto".

Por este motivo, el responsable de la carrera ciclista francesa concluye que "con el fin de sancionar esta manipulación" de la que han sido objeto por parte de Batasuna, han decidido anular el acuerdo "fraudulentamente lograd".

Asimismo, Leblanc destaca que en sus cien años de existencia, el Tour ha convertido el rechazo a la violencia en un "elemento central" de su trayectoria, lo que ha hecho que esta competición sea "un símbolo universal de paz y fraternidad entre los pueblos, así como una fiesta y una cita única para los apasionados del ciclismo de todo el mundo".