En declaraciones a Servimedia, el portavoz de la AUC, Alejandro Perales, dijo que es muy positivo que la contraprogramación se regule por ley. A su juicio, esta práctica, que consist en cambiar a última hora la espacios previstos para desconcetar a la competencia, es "un fraude al espectador".

Perales considera razonable que las TV informen con once días de antelación de los programas que van emitir, al entender que es un plazo suficiente que garantiza el derecho de los espectadores a estar informados.

Por su parte, la ATR asegura que es una "excelente noticia" que las televisiones estén dispuestas a respetar la programación anunciada, ya que los cambios de última hora perjuican los intereses de los espectadores, según informó a Servimedia un portavoz de la asociación.

"La competencia entre las cadenas no debe perjudicar a los telespectadores, que tienen derecho a estar informados con suficiente antelación de toda la oferta televisiva", indicó el citado portavoz.