Para Uatae, estos datos "desmontan" la "utilización política" del conjunto del colectivo como argumento en contra de la medida. Su secretaria general, María José Landaburu, indicó que “los autónomos viven de su propio esfuerzo, sin empleados en la mayoría de los casos y lo que de verdad les lastra es la abusividad horaria de las grandes superficies que operan sin límites”. Actualmente el 14,1% de los autónomos tienen asalariado y entre ellos, el 52,9% solo disponen de un asalariado.Asimismo, el 35,9% tienen entre dos y cuatro asalariados, y solo el 11,2% cuenta con cinco o más asalariados el porcentaje es del 11,2%. "Lo que sí preocupa al colectivo son los alquileres abusivos de locales, la brecha de protección social o la falta de derechos en equiparación con las y los asalariados, como en el subsidio de mayores de 52 años”, afirmó Landaburu.

En este sentido, Uatae insistió en que la reducción de la jornada laboral "no debe entenderse como un obstáculo para los autónomos, sino como una mejora para millones de trabajadores y como una palanca para avanzar hacia un modelo laboral más productivo donde las personas puedan disponer de tiempo para seguir viviendo sus vidas". Al mismo tiempo, reclamó que se abran espacios de diálogo en torno a las reformas que sí resultan determinantes para el futuro inmediato de las y los trabajadores por cuenta propia.

"El foco no debería ponerse en las y los autónomos como excusa para frenar la reducción de jornada, sino en cómo dotarles de un marco que deje de situarles en la precariedad y les permita crecer con derechos", concluyó Landaburu.