“El superar la asamblea de CEOE es un elemento positivo para que la patronal vuelva a sentarse y podamos avanzar”, declaró Álvarez durante una entrevista en Servimedia. En su opinión, el hecho de que exista un proceso interno de elecciones en CEOE “no ayuda” a que se pueda avanzar, incluso aunque hubiera un único candidato.

Precisamente, sobre la candidatura de la vicepresidenta de Foment, Virginia Guinda, como alternativa al actual presidente, Antonio Garamendi, el líder de UGT mostró su “respeto” por el proceso interno. No obstante, sí se refirió a algunas de las cuestiones que Guinda está poniendo sobre la mesa, como calificar la reforma laboral de “anticuada”.

POR TENER BOCA

“Francamente, me parece que decir que la reforma laboral se ha quedado obsoleta casi casi que es hablar porque se tiene boca. Algo se queda obsoleto cuando ha pasado el suficiente tiempo y se ha superado por la historia”, manifestó Álvarez.

A su criterio, esto se “corresponde muy poco” con los resultados que está dando la nueva legislación y sí tiene que ver con “un afán de encontrar debate interno en la CEOE en el que yo no voy a entrar”. Al hilo de esto, resaltó que no solo los empresarios han cedido, sino que para alcanzar el acuerdo los sindicatos “han tragado” con cosas muy importantes.

Además, criticó que una parte de la CEOE esté esperando que si hay un Gobierno del PP derogue la reforma laboral y la de pensiones. “Pero que sepan que, aparte de la vida política, existe la vida social y en un país se puede vivir con consenso, con acuerdo, con estabilidad jurídica y eso es muy bueno, apuntó Álvarez, quien avisó de que también “se puede vivir con confrontación”.

En cuanto a las declaraciones de Guinda sobre que el diálogo social debe ser “más fructífero”, el líder de UGT advirtió de que por las “posiciones” que la vicepresidenta de Foment está trasladando, con ella no sería más productivo porque “no habría habido diálogo”. En este sentido, mostró su deseo de que en la CEOE haya una dirección “que tenga en cuenta los intereses de la mayoría de las empresas de este país, que van en la línea de cerrar consensos” y “de la estabilidad política”.

NEGOCIACIÓN INTERRUMPIDA

En todo caso, Álvarez lamentó que las conversaciones formales en el marco del V acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) estén “interrumpidas” desde el mes de mayo. Pese a ello, reconoció que allí donde los sindicatos tienen fuerza, los convenios colectivos se están firmando con alzas salariales por encima del 4% y del 5%, incorporando “muchos” cláusulas de revisión salarial.

En su opinión, eso debería “posibilitar” que se vuelva a la mesa de negociación y alcanzar un acuerdo general sobre convenios, para que los que se están firmando no tengan que hacerse “a costa de bronca” y “huelgas”, lo que hace que se dé una pérdida de horas de trabajo “alarmante”.

Finalmente, manifestó que “los sindicatos de clase, a pesar de lo que se dice algunas veces en este conflicto de nosotros, estamos para intentar que nadie quede atrás, sobre todo los trabajadores” de sectores con “presencia sindical”, para que no queden “descolgados del mantenimiento del poder adquisitivo” de los salarios en España.