"Meals to die for" (Comidas por las que morir) es el título de esta obra que recopila las últimas cenas preparadas por el jefe de cocina Brian Price para un total de 140 centros penitenciarios norteamericanos a lo largo de su experiencia profesional.

Este experto cocinero, que en su día también tuv que cumplir condena por abusos sexuales, explica en su libro cómo al condenado a muerte se le ofrecen platos que, después, él ha bautizado de manera muy peculiar. De esa forma, hay recetas que se denominan "Arroz Rigor Mortis" o "Sopa de patatas post-mortem", entre otras.

El chef afirma que, cuando cocinaba para un condenado a muerte, hacía todo lo posible por ofrecerle lo mejor. "Una vez, alguien me pidió que le diera simplemente porquería, pero al final le di un yogur", asegura.