Salud
Una de cada cuatro personas en el mundo carecen de acceso a agua potable con garantías de seguridad
- Más de 100 millones beben agua sin tratar y 354 defecan al aire libre
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Una de cada cuatro personas en todo el mundo carecen de acceso a agua potable “gestionada de forma segura”; 106 millones beben directamente de fuentes sin tratar, y 354 millones tienen que defecar al aire libre.
Así lo puso de manifiesto el nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef, publicado este martes con motivo de la Semana Mundial del Agua. Según sus conclusiones, 2.100 millones de habitantes del mundo –uno de cada cuatro-- carecen de acceso a agua potable “procedente de instalaciones, libre de contaminación y disponible cuando se necesita. La cifra incluye a 106 millones de personas que beben directamente de fuentes superficiales sin tratar".
Además, la investigación revela que 3.400 millones siguen sin tener acceso a un sistema de saneamiento gestionado con seguridad. Esto es, aseos donde los residuos se tratan y eliminan de forma adecuada. De ellos, 354 millones practican la defecación al aire libre. Alrededor de 611 millones de personas en todo el mundo viven en hogares donde no hay ninguna instalación higiénica y 1.700 millones carecen de acceso a estos servicios básicos.
Según estiman la OMS y Unicef, los habitantes de países de ingresos bajos y medios tienen más del doble de probabilidades de no poder acceder al agua potable y a servicios de saneamiento, y el triple de posibilidades de carecer de acceso a los servicios de higiene.
DESIGUALDADES
El informe sí recoge avances en las zonas rurales, que pese a todo, siguen retrasadas. Entre 2015 y 2024, la cobertura de agua potable ‘gestionada de forma segura pasó del 50 al 60% en estos territorios, y la cobertura de higiene básica subió del 52 al 71%. A cambio, los avances en zonas urbanas se estancaron en este mismo período.
Con datos de 70 países, el informe indica que la mayoría de mujeres y niñas sí disponen de material sanitario para la menstruación y lugares donde cambiarse, aunque no en cantidad suficiente. En comparación con las mujeres adultas, las adolescentes de 15 a 19 años participan menos en actividades públicas como ir a la escuela, trabajar o asistir a actos sociales cuando tienen la regla. Mujeres y niñas son, en general, las encargadas del suministro de agua en aquellas comunidades donde no llega.
CONCLUSIONES
El informe ha sido elaborado por el Programa Conjunto de la OMS y Unicef para el Monitoreo del Acceso al Agua Potable, el Saneamiento y los Servicios de Higiene. Según sus resultados, se han producido avances desde 2015, pero las desigualdades y las carencias persisten.
Advirtió asimismo de que, a medida que se aproxima el final del plazo marcado en los ODS, el reto de eliminar la defecación al aire libre para 2030 y de conseguir un acceso universal al agua, el saneamiento y los servicios de higiene “necesitará una aceleración”. La cobertura total de este tipo de servicios “parece cada vez más difícil de alcanzar”, alertó.
(SERVIMEDIA)
26 Ago 2025
AGQ/mjg