Propone, en concreto, que sean los planes hidrológicos de cuenca los que decidan "para qué utilizar el agua, atendiendo adecuadamente los requerimientos ambientales y garantizando plenamente la disponibilidad de agua de calidad para todos los usos, a todos los territorios, manteniendo la prioridad otorgada por el Gobierno de España a las cuencas mediterráneas".

Precisa, en otra enmienda, que el agua "no puede ser un elemento identitario de confrontación, sino que necesita de un gran pacto político, territorial y social, materializado a través de los planes hidrológicos de cuenca, que debemos convertir en espacios para el diálogo, el consenso y el pacto".

Puig es uno de los tres militantes del PSOE en la Comunidad Valenciana que ha anunciado su candidatura a dirigir el partido en esta comunidad autónoma. Los otros dos son Jorge Alarte y Francesc Romeu.

Aunque Puig estuvo muchos años ligado al ex presidente de la Generalitat valenciana Joan Lerma, asegura que defiende su proyecto desde la autonomía política y con ánimo integrador, desde un movimiento, "Nuevo Socialismo Valenciano", en el que participan ya muchos cuadros del partido, incluidos algunos diputados y senadores.

Sus enmiendas a la ponencia deben ahora ser debatidas en la Comunidad Valenciana y después, en su caso, integrarse en las que la federación eleve para el debate final en el Congreso, que se celebrará el primer fin de semana de julio.

En otra de las enmiendas propone que el nuevo sistema de financiación autonómica prime la población de cada comunidad, y que "una parte menor de los recursos" vaya ligada a criterios de nivelación interterritorial, una tesis próxima a la de los socialistas catalanes y que se aleja de las reivindicaciones, por ejemplo, de Extremadura.

Puig quiere también que el PSOE impulse "iniciativas para el cumplimiento efectivo del silencio administrativo", de acuerdo con el espíritu de la Ley del Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común.

Denuncia que esa ley establece el principio genérico de que el silencio administrativo es favorable al ciudadano, pero legitima al legislador para establecer el silencio negativo, lo que ha hecho aumentar notablemente el número de leyes estatales y autonómicas que establecen "un muro" de protección de la administración en detrimento del ciudadano.

También considera necesario mejorar la comunicación desde los gobiernos para que los ciudadanos comprendan su gestión, y defiende la permanencia de las estructuras comarcales del partido en esta comunidad.

La ponencia del partido establece modificaciones en la organización interna, pero Puig considera que, si la comunidad autónoma puede legislar en materia de comarcas, no tiene sentido que la dirección del partido en la comunidad autónoma no pueda decidir su organización en ese mismo sentido.

Por ello, "sin menoscabo de la necesaria estructura provincial" que defiende la ponencia, las enmiendas de Puig buscan que el propio PSPV pueda decidir su organización en los niveles inferiores y mantener la división comarcal.