Un nuevo dispositivo permitirá al paciente supervisar y controlar su dosis de anticoagulante

- Creado por investigadores del CSIC, del ICN2 y del Ciber-BBN

Madrid
SERVIMEDIA

Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), del Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología (ICN2) y del Ciber de Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina (Ciber-BBN) han desarrollado un dispositivo biosensor que permitirá monitorizar los anticoagulantes como el Sintrom (acenocoumarol) para que el propio paciente o su médico puedan supervisar y regular la dosis para conseguir el “efecto óptimo”, algo “clave” en personas medicadas con anticoagulantes.

Así lo indicó este lunes el CSIC a través de un comunicado en el que también se especifica que el tratamiento con anticoagulantes puede presentar riesgos, ya que, según explicitaron los investigadores, “si la dosis es baja, no tendría el efecto requerido y puede producirse coagulación de la sangre”.

“Por el contrario, si la dosis es muy alta puede desencadenar otro tipo de efectos secundarios como hemorragias internas”, agregaron, para, a continuación, precisar que la dosis adecuada “depende de muchos factores como el peso, la edad, la alimentación o la interacción con otros medicamentos”.

El grupo NanoB2A del Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología, dirigido por la investigadora del CSIC Laura Lechuga, fue el responsable del diseño de este dispositivo plasmónico, que contiene unas nanoestructuras de oro en las que se pueden unir bioreceptores específicos que detectan el anticoagulante Sintrom a partir de una muestra de sangre del paciente, sin necesidad de realizar un tratamiento previo.

Lechuga puntualizó que los investigadores estudiaron las condiciones óptimas para desarrollar este dispositivo biosensor, obteniendo “una excelente sensibilidad para detectar el anticoagulante, lo que indica que es posible medir concentraciones muy bajas de este fármaco”.

Dado que es una tecnología cuantitativa y altamente sensible, este dispositivo es muy adecuado para su uso en centros clínicos, para mantener una medida constante de este medicamento o, incluso, para que los propios pacientes puedan realizar el autocontrol de la medicación, algo clave en personas medicadas con anticoagulantes.

El resultado de esta investigación ha sido publicado en la revista 'Biosensors and Biolectronics'.

(SERVIMEDIA)
26 Nov 2018
MJR/caa