Así lo transmitió en su discurso ante la Junta Directiva Nacional del PP, el máximo órgano de la formación entre congresos, reunida por segunda vez desde que asumió la Presidencia del PP tras el proceso congresual que se abrió con la marcha de Mariano Rajoy. Casado aprovechó para dirigirse a los suyos porque “ha llegado el momento que estábamos esperando” con la convocatoria electoral anunciada por el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez.

“La convocatoria de elecciones nos ha encontrado cuando ya estábamos en modo electoral y haciendo política con mayúsculas”, defendió Casado, para acto seguido decir “alto y claro” que su objetivo es “ganar” y “no a empatar”, porque “no hay que pensar solo si hace falta pactar” con otras formaciones a la “izquierda” y la “derecha” con las que si fuese “necesario” se intentaría cerrar acuerdos.

Llamó a “desmontar el mito progresista” durante la campaña electoral para que “aumente esa corriente de personas que están viniendo al PP”. También pidió a su partido que no se preocupen por lo que hagan los demás, aunque “si es necesario, podemos pactar a nuestra izquierda y a nuestra derecha”, refiriéndose así a gestar acuerdos postelectorales con Ciudadanos y Vox.

Lo que “nunca” hará el PP, prosiguió Casado, es pactar con independentistas, con comunistas o con el PSOE de Sánchez. En este sentido, alertó de que “si el PSOE puede volver a formar Gobierno” tras las elecciones generales del 28 de abril, “va a volver a dar lo que pedían los independentistas”.

Sostuvo que si hay una cita con las urnas el próximo abril es porque “el PP ha derribado al Gobierno”. Consideró así que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “ha tirado la toalla porque le hemos puesto en una situación límite” al no tardar “ni un minuto” en denunciar su “negociación” con los secesionistas catalanes.

En palabras de Casado, se han convocado elecciones porque el PP “ha pillado pactando” al Gobierno con los independentistas. Y si no fuese por el PP, sostuvo que “seguirían negociando con los que quieren romper España”. La fecha elegida por Sánchez, dijo, se debe a una estrategia para “limitar daños electorales” porque los barones socialistas tienen “la obsesión” de no coincidir con su líder en las urnas. “Le consideraban tóxico”, valoró.

Frente a ello, prometió que el PP pondrá a los separatistas “en su sitio” y parará “el golpe”. “Nosotros queremos dar continuidad a la historia constitucional española”, reseñó, para a renglón seguido volver a decir que aplicará el artículo 155 de la Constitución española en cuanto llegue al poder y que lo hará “con la extensión y la duración que otros no quisieron en 2017”.

En este punto, enfatizó que “lo moderado es hacer que se cumpla la ley” y “no sostener vivo el chantaje ni llamarlo diálogo”. “No se puede romper la Constitución en nombre del diálogo”, indicó Casado, bajo la creencia de que el obstáculo a la convivencia es el nacionalismo y una izquierda que “prefiere romper España” antes que ponerse de acuerdo con el PP.

Criticó a quienes quieren “una España suya” cuando el PP desea “una España de todos” y explicó que precisamente por ello los españoles han salido a la calle para defender la bandera nacional. Dicho esto, subrayó que no permitirá que se excluya al PP y que “se nos cambie de país sin preguntarnos”.

Dijo “sí” a la “moderación” pero “no” a la “sumisión” y encargó a su partido ir con los principios en la mano y dispuestos a explicar las soluciones que ofrece el PP para España desde la calle. “Tenemos que convencerles, tenemos que entusiasmarles, tenemos que demostrarles que el PP es el partido que mejor defiende lo que ellos quieren”, sintetizó.

Se refirió así al decálogo de principios de los que ya habló en la Convención Nacional de enero y que se resumen en “fortalecimiento institucional, revolución fiscal, educación de calidad y con libertad de elección, resolver el reto demográfico, reducir la Administración, cohesión territorial, Justicia imparcial y ágil, más y mejor seguridad, España presente en el escenario institucional y liderar la revolución tecnológica”, así como la lucha contra la pobreza.