Así lo ha avanzado a Servimedia el nuevo viceconsejero de Políticas Sociales, Familias y Natalidad de la región, Javier Luengo, en la primera entrevista que concede tras su nombramiento en el consejo de gobierno de esta semana.

Luengo explicó que entre sus objetivos está dar respaldo a todos los tipos de familias que existen en la Comunidad de Madrid, pues "nos preocupan todas" y por eso el nombre de la Consejería incluye una mención en plural a las "familias".

Entre otros retos, señaló la necesidad de "apoyar la natalidad" y de apoyar a las familias con medidas concretas que van a definirse en una "estrategia de apoyo a las familias" que la Consejería que dirige Alberto Reyero pretende definir en la primera parte de su mandato.

Luengo destacó también que otra de las dedicaciones principales en este departamento será actualizar la "normativa obsoleta" que tiene la Comunidad de Madrid en prestación de servicios sociales y que, en su opinión, dificulta prestar una buena atención a los ciudadanos en estos tiempos.

Así, una de las prioridades será "actualizar" la Ley de Servicios Sociales para que la región vuelva a ser "una referencia en materia de políticas sociales", cosa que cree que ha perdido "en la última década", en la que otras administraciones autonómicas "nos han adelantado en materia social".

Adujo que en 2019 las necesidades sociales de los madrileños y las urgencias de las familias "no son las mismas que hace 20 o 25 años" y por eso conviene actualizar la normativa vigente para darle de mayor "flexibilidad" y poder aportar soluciones "creativas" que "una ley que se ha quedado antigua no permite".

CONCIERTOS SOCIALES

Como ejemplo, citó la opción del "concierto" con entidades sociales a la hora de prestar atención a personas con discapacidad intelectual, un asunto que Luengo conoce a la perfección de su anterior etapa como director general de Plena Inclusión Madrid.

También mencionó la "colaboración público privada" como solución, especialmente con el Tercer Sector de la Comunidad de Madrid, que representa un "ejemplo" para el resto de España pero requiere de "un marco regulador lo más flexible posible".

En materia de discapacidad, Luengo aplaudió que las organizaciones del sector "vienen desarrollando un trabajo estupendo desde hace muchas décadas y resolviendo una situación que la administración no es capaz de llegar".

Como mejora, abogó por eliminar la lista de espera en la atención temprana a las personas con discapacidad, así como dotar de "más recursos y hacer un plan" que aporte más profesionales para atender esta cuestión. "Cuando se detecta a un niño una discapacidad, hay que hacer valoración, diagnóstico y una atención lo más temprana posible. En ese proceso debemos ser más eficientes, acortar los tiempos y poner recursos para que haya más capacidad al atender sus necesidades", argumentó.

Asimismo, Luengo defendió la tesis de "apostar por una vida más autónoma, independiente e inclusiva" en el caso de personas con discapacidad y también de personas mayores, frente a la solución de la asistencia pública tradicional.

Eso requiere, según apuntó, adaptar la normativa a los postulados de la Convención de Naciones Unidas para las Personas con Discapacidad y prestar una "atención más individualizada" según las necesidades de cada persona, lo que contribuiría a "generar mayor eficiencia en la red".