Inclusión social

Jóvenes con discapacidad se ‘ponen las pilas’ para estudiar y trabajar

MADRID
SERVIMEDIA

Las estadísticas reflejan las dificultades que tienen los jóvenes para triunfar en el ámbito educativo y en el laboral, algo que es más complicado para las personas con discapacidad. Pero muchos jóvenes con discapacidad encuentran un ejemplo en personas como Talía, que rompe con los datos: compatibiliza sus estudios de la ESO con el empleo que ha logrado gracias a un proyecto de colaboración entre Coca-Cola y Fundación ONCE.

Talía es una joven con discapacidad intelectual acaba de firmar un contrato indefinido y está terminando de cursar los estudios de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), formación que suma a una Formación Profesional (FP) básica de estética.

Asegura a Servimedia que la discapacidad le ha “puesto las pilas”. “Más que obstáculos”, indica con orgullo, le ha permitido superarse y encontrar empleo. Por ello, el caso de esta joven nacida en Cuba es excepcional en las estadísticas de empleo de la población con discapacidad y se aleja de esa población joven que ni estudia ni trabaja, los populares ‘ninis’.

El Observatorio sobre Discapacidad y Mercado de Trabajo en España (Odismet), impulsado por Fundación ONCE e Inserta Empleo, en datos de 2017, indica que la tasa de empleo de las personas con discapacidad en España fue del 25,9%, lo que supone casi tres veces menos que la tasa de personas sin discapacidad que era para ese mismo año alcanzó el 64,4%.

En esas cifras, las mujeres mostraron una tasa de empleo es más baja (25,6% frente a 26,0% de los hombres). A ello hay que añadir una variante, la de la edad, pues la situación de los jóvenes en general en nuestro país es especialmente complicada.

Según se desprende de Odismet, el nivel educativo, ese que Talía se empeña en mejorar compatibilizándolo con su trabajo, resulta relevante a la hora de predecir la posibilidad de estar ocupado. De hecho, sólo el 3,6% de las personas con discapacidad sin estudios esta empleada, mientras que esta cifra se eleva hasta el 45,3% en las personas con discapacidad con formación superior.

El caso de esta joven también rompe con otro dato: en la población con discapacidad, sólo las personas con discapacidad mental tienen tasas más bajas de empleo (18%), mientras que personas con discapacidad intelectual, como Talía, arrojan una tasa del 19,5%. Las personas con discapacidades sensoriales tienen mayor nivel de empleo, especialmente en las personas con discapacidad auditiva (45,8%).

APOYO DESDE INSERTA EMPLEO

Que Talía se salga de la tónica general de las estadísticas tiene un detonante. La joven realizó varios cursos de ofimática y de búsqueda de trabajo en Inserta Empleo, la entidad de Fundación ONCE para la formación y el empleo que cuenta con apoyo del Fondo Social Europeo. Y fueron los expertos de Inserta quienes, precisamente, le animaron el año pasado para que participase en el Proyecto Gira Jóvenes Coca-Cola.

Ahora, con perspectiva, esta joven de 21 años asegura que repetiría la experiencia “sin dudarlo”. Se trata, dice, de una iniciativa “bastante buena y recomendable, porque enseña muchas cosas, no sólo en lo laboral, sino también en lo personal”. De hecho, en la gira se conoció a sí misma, sus fortalezas y debilidades. “Pero, sobre todo, en cómo trabajar en ellas”, añade.

Talía aprovechó bien su paso por la gira y logró un hueco en una “experiencia”, que consistió en un contrato en una cadena de hamburgueserías en Madrid, un empleo que, según reconoce le viene como anillo al dedo pues le gusta el mundo de la hostelería y se maneja “muy bien” relacionándose con los clientes.

A principios de octubre firmó un contrato indefinido: “Yo llevaba mucho tiempo buscando trabajo. Mi familia está súper contenta”. Mientras, también se esfuerza con los estudios, pues, tras cursar una FP básica de peluquería y estética, está sacándose la ESO en educación de adultos.

EMPLEABILIDAD DE JÓVENES

David Pastor, técnico satélite de Inserta Empleo, explica a Servimedia que la entidad de Fundación ONCE se incorporó a la iniciativa Gira Jóvenes de Coca-Cola el año pasado, y que junto a otra decena de entidades que defienden los derechos de colectivos vulnerables buscan la empleabilidad de jóvenes de entre 16 y 23 años. “El fracaso escolar como no superar la ESO, pertenecer a familias extranjeras o tener discapacidad coloca a estos jóvenes en riesgo de exclusión”, recalcó el técnico.

Pastor subraya que “a estas personas les cuesta más solucionar cuestiones como enfrentarse a una entrevista y mejorar el currículum”, algo que aprendieron los jóvenes seleccionados en las distintas etapas de la gira.

Gracias a la colaboración de Inserta con Coca-Cola, además de Talía, también ha participado en esta iniciativa Lucía, otra madrileña de 21 años, que terminó la ESO y en verano de 2019 logró la titulación de Monitora Ocio y Tiempo libre. Le gusta mucho estar con niños y ha trabajado esporádicamente como monitora y como modelo. No sabe qué dirección profesional tomar, por lo que espera encontrar un rumbo participando en la VIII edición de Gira Jóvenes, que se acaba de presentar, y en la que ha sido seleccionada para el Campus para ayudarla a descubrir su vocación.

Otro caso es el de Jorge, de 23 años. Su nivel de estudios es un Programa de Cualificación Profesional Inicial (dirigido a los alumnos que no hayan obtenido el título de Graduado en la ESO y que le ofrecen unas competencias profesionales con las que puedan trabajar y ampliar sus estudios).

Jorge también participó en todas las fases de Gira Jóvenes, donde fue uno de los primeros participantes en la Gastroescuela de esa iniciativa, gracias a la colaboración de Azotea Grupo. En febrero de 2019, se incorporó en la cocina del restaurante Nubel (en el Museo Reina Sofía) y tras los seis meses dentro del proyecto logró un contrato indefinido en este espacio. Desde Coca-Cola subrayan que “más allá de mejorar sus habilidades para el empleo, su paso por Gira Jóvenes ha permitido a Jorge mejorar sus relaciones sociales y ganar confianza en su mismo”.

Este otoño, la 8ª edición de Gira Jóvenes ha ampliado su alcance a estudiantes de Formación Profesional de entre 16 y 23 años, con una clara apuesta por la transformación de la España rural.

Los impulsores de Gira Jóvenes lo definen como un viaje para formar, inspirar y activar a los jóvenes para que se conviertan en agentes de cambio y motor económico en sus territorios. Desde 2012, a través del itinerario “Construye tu Pasión”, desarrollado en colaboración con más de 10 entidades sociales expertas en formación y empleabilidad -Cruz Roja Española, Fundación Don Bosco, Fundación Exit, Fundación ONCE / Inserta, Norte Joven, Opción 3, Pinardi, Asociación La Rueca, Fundación Secretariado Gitano y Fundación Tomillo-, ha ayudado a más de 4.900 jóvenes en situación de vulnerabilidad.

(SERVIMEDIA)
03 Nov 2019
AHP/gja/man