Ética periodística

La Fape considera que llamar “hijos tontos” a personas con Down vulnera su código deontológico

- Tras una queja del Cermi por varios artículos y una entrevista de Arcadi Espada

MADRID
SERVIMEDIA

La Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) considera que Arcadi Espada vulneró varios artículos del Código Deontológico de la federación por seis trabajos periodísticos publicados en el ‘El Mundo’ entre 2009 y 2018 y por sus manifestaciones a Risto Mejide en ‘Chester’ de Cuatro en febrero de 2019.

Esta resolución responde al escrito presentado ante la FAPE por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), en los que el autor de los artículos se refería a las personas con síndrome de Down como “víctimas” y “enfermos” y usó calificativos como “hijos tontos”, “peores”, “patéticos”, “desgraciados” y “víctimas de su condición”.

Entre otras observaciones, el código deontológico de la federación de periodistas apunta a que “el periodista extremará su celo profesional por el respeto a los derechos de los más débiles y discriminados” y mantendrá “especial sensibilidad en los casos de informaciones u opiniones de contenido eventualmente discriminatorio o susceptibles de incitar a la violencia o a prácticas humanas degradantes”.

Asimismo, la organización considera infringidos artículos del código que disponen que “sin perjuicio de proteger el derecho de los ciudadanos a estar informados, el periodista respetará el derecho de las personas a su propia intimidad e imagen, teniendo presente que: (…) con carácter general deben evitarse expresiones, imágenes o testimonios vejatorios o lesivos para la condición personal de los individuos y su integridad física o moral y en el tratamiento informativo de los asuntos en que medien elementos de dolor o aflicción en las personas afectadas, el periodista evitará la intromisión gratuita y las especulaciones innecesarias sobre sus sentimientos y circunstancias”.

En su resolución, la FAPE subraya que la opinión del periodista es “ciertamente provocadora” sobre un tema “sensible”, por lo que recuerda que es “importante separar la información de la opinión”, aunque ésta “no está desprovisto de la capacidad injuriosa cuando se abusa de la crítica”.

(SERVIMEDIA)
11 Dic 2019
AHP/pai