Así lo precisó este martes a través de un comunicado en el que recoge media docena de consejos con el objetivo de que los consumidores puedan aprovechar “al máximo” estas ofertas y en el que recuerda que lo “más importante” es comprar “sólo lo que realmente se necesita y no renunciar a ningún derecho”.

A este respecto, para la organización, lo “primero” es “pensar lo que hace falta antes de salir de tiendas” y elaborar una lista “para evitar compras impulsivas”.

Junto a ello, mencionó la importancia de conocer “bien” la normativa vigente y puntualizó que los productos deben haber formado parte de la oferta habitual del establecimiento en cuestión durante al menos un mes y que su calidad “no puede ser diferente a la que tenían antes de estar rebajados”.

Además, aseveró que el precio antiguo debe ser “el menor del último mes” y aconsejó a los consumidores comprobar que los productos en rebajas mantienen su precio original junto al rebajado o, en su caso, que se indica “de forma clara” el porcentaje del descuento.

Tras destacar que el servicio posventa y la aplicación de las garantías son iguales durante las rebajas que durante el resto del año”, afirmó que en algunos comercios se establecen “condiciones especiales” para las compras en periodo de rebajas en cuanto a devoluciones o aceptación del pago con tarjeta.

Unas condiciones que también deben estar “claramente indicadas” y en un lugar “visible” para el consumidor, según explicó OCU para, a continuación, señalar que al comprar por Internet el consumidor tiene derecho a devolver el producto “sin dar explicaciones” en 14 días naturales desde la entrega del producto.

Con todo, la asociación instó a comprar en establecimientos adheridos al sistema arbitral de consumo, que, a su entender, ofrecen “más garantías” al consumidor y en caso de desacuerdo se prestarán a resolver sus diferencias con el cliente “de una manera rápida y gratuita”.

A la hora de reclamar, incidió en la importancia de conservar el tique o factura simplificada de las compras, ya que, si se pierde, “también se pierde el derecho a cambiar, devolver o reclamar tras la compra”.

Finalmente, si el comprador no llega a un acuerdo amistoso con el establecimiento, debe solicitar la hoja de reclamaciones y plasmar la queja en ella y, en este sentido, OCU remarcó que es obligatorio que todos los establecimientos cuenten con hojas de reclamaciones a disposición de sus clientes.