Coronavirus

El Gobierno cree que la situación de la inmigración ilegal es “algo mejor” por la pandemia pero es un “problema añadido”

Madrid
SERVIMEDIA

La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, señaló este martes que la situación de la inmigración irregular en España es “algo mejor” de la que se ha producido en años anteriores, ya que se está “reduciendo” porque el control de fronteras con motivo de la pandemia en los países habitualmente emisores está siendo “mucho más estricto”. No obstante, admitió que resulta un “problema y una preocupación añadida” por el hecho de que la enfermedad se pueda transmitir a través de dichas fronteras.

Así lo defendió Montero en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que reconoció que España se encuentra en una situación “especialmente compleja” por este motivo a pesar de que el cierre de fronteras en muchos países conlleva que el flujo de la población migrante sea “ordenado y controlado” y, a su juicio, “permita realmente que las personas puedan llegar en las condiciones adecuadas y pueda producirse una integración adecuada en nuestros países”.

Tras valorar que Marruecos haya decidido cancelar la Operación Paso del Estrecho y subrayar que los países de la UE van “todos a una”, puntualizó que el resto de países está tomando sus propias decisiones con respecto a sus fronteras. “Sin duda, este tema agrava también la situación de la llegada de personas de manera ilegal a nuestro país”, agregó, al tiempo que insistió en que esta llegada se está “reduciendo” como consecuencia de los controles establecidos para contener la propagación del virus.

Con relación a la llegada a España de casos importados de zonas especialmente afectadas por rebrotes en Europa, la portavoz del Gobierno defendió que, “desde el primer momento”, España ha estado trabajando en el marco de la UE por tener un protocolo “común conjunto para poder actuar de manera coordinada ante cualquier situación que se pueda producir en el interior de la propia UE”.

A su entender, la libre circulación de personas obliga a los países europeos a disponer de “parámetros similares para que, si hay una persona circulando que tiene síntomas o algún rasgo identificatorio de la enfermedad, pueda ser detectado en el menor plazo de tiempo posible, entre por donde entre al interior de las fronteras europeas, y que el abordaje sea similar”.

Montero agradeció al trabajo de los ministerios de Transportes, Exteriores e Interior de España y el resto de Europa así como de la Agencia Europea de Seguridad Aérea y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) que, a su entender, ha permitido contar con un protocolo “bastante robusto” de seguimiento de esas personas.

“La situación requiere de esa coordinación y, por tanto, seguiremos trabajando de la mano de Europa para que los proyectos sean conjuntos”, dijo, convencida de la importancia de que, cuando el próximo 1 de julio reabran las fronteras para los países no pertenecientes a la zona Schengen, los países europeos cuenten con protocolos de actuación “similares”. “Si no adoptamos los mismos procedimientos, vamos a tener serias dificultades para que cada país, individualmente, pueda garantizar que no haya transmisión de la enfermedad en la Unión una vez que los estados miembro la hemos controlado”, sentenció, consciente de la relevancia de continuar trabajando “de manera conjunta”.

(SERVIMEDIA)
23 Jun 2020
MJR/pai