Discapacidad

El arzobispo de Sevilla se afilia a la ONCE: “España se puede sentir orgullosa de esta institución”

MADRID
SERVIMEDIA

El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, ha pedido a la Santa Sede su relevo al frente de la Archidiócesis hispalense al cumplir la edad reglamentaria y en un momento en el que la pérdida progresiva de la visión le ha llevado a adaptarse a las nuevas circunstancias con la ayuda de la ONCE.

En una entrevista concedida al boletín mensual de ONCE Andalucía, Juan José Asenjo (Sigüenza, Guadalajara, 1945) explica que ha perdido la visión central, “el detalle”, pero mantiene la visión periférica. Dice que los oftalmólogos “van a tratar de conservar ese 20% de visión que tengo y frenar un poco el deterioro de la mácula”.

“Cuando salí de la clínica, donde estuve sedado por el dolor terrible del ojo, tuve el 'mal del clavo', salí muy sobrecogido en cuanto a mi futuro, cuál iba a ser mi vida, y con la ONCE se han abierto puertas de luz que me permiten mirar el futuro con esperanza”, relata.

El prelado señala que todavía no ha tenido excesivo tiempo para manejar los recursos que le ha facilitado la ONCE, organización a la que se ha afiliado. “Tengo que familiarizarme más con la pantalla, con la lupa electrónica, que me parece un instrumento magnífico, estoy aprendiendo. Lo que antes he aprendido es a manejar este reloj que habla y además tiene los números muy grandes y las manecillas y lo veo muy bien. Sí, es un antes y un después, creo que se puede describir así mi sensación después de conocer a la ONCE”.

Al igual que hace con el resto de afiliados nuevos, la ONCE le ha elaborado un plan individualizado de atención que incluye apoyo al bienestar social, servicio de rehabilitación visual o tiflotecnología, entre otros servicios.

El arzobispo de Sevilla sostiene que quienes le están atendiendo “son muy competentes, buenos profesionales, que creen en lo que están haciendo y que luego tratan a las personas con mucha delicadeza y mucho cariño”.

INYECCIÓN DE CONFIANZA

De su relación con la ONCE destaca “la familiaridad y la cercanía con que tratan a los afiliados. El optimismo que tratan de infundir en el afiliado, el usuario que va muy consciente de sus limitaciones y ahí recibe una infusión, una inyección de confianza y de optimismo”.

En la entrevista al boletín de ONCE Andalucía sostiene que puede realizar casi todas las actividades que antes hacía y que está viviendo “esta etapa con mucha normalidad, incluso con alegría, no me siento un desgraciado, ni muchísimo menos, y acepto mis limitaciones, pero no veo en ellas una tragedia, sino un cambio no sustancial, sí accidental, en mi vida anterior”.

De la ONCE dice que es “una institución admirable, yo no la conocía apenas, no la conocía por dentro, me parece que es una institución providencial”. “Creo que España y los ciegos españoles se pueden sentir orgullosos de esta institución. Yo me he sentido tratado con mucho cariño por parte de todas las personas. La gran mayoría de las personas que encuentran la ONCE en su camino describen ese momento como una salvación, como un antes y un después en sus vidas, una vez que aprenden a adaptarse a esa nueva situación”, afirma.

Sobre las personas con discapacidad mantiene que las siente como “miembros de mi familia. He entrado a formar parte de esa familia. Los siento como mucho más cercanos a mí. Como miembros de mi familia o miembro yo de su familia. Para mí son hermanos, personas cercanas y amigos”.

(SERVIMEDIA)
07 Mar 2021
GJA/pai