“Es imprescindible que las personas con sordera, como cualquier otro ciudadano, accedan a la información ofrecida en los actos electorales, ya sean mítines u otro tipo de encuentros con la ciudadanía, vídeos de campaña, debates televisados, etc., y poder ejercer el derecho de voto informado”, argumenta Fiapas en un comunicado.

Para ello “es preciso disponer de recursos y medidas de apoyo a la accesibilidad auditiva, a la información y a la comunicación, tales como: subtitulado en directo en mítines espacios con bucles magnéticos, piezas audiovisuales subtituladas y con interpretación a la lengua de signos (para aquellas personas sordas que sean usuarias de la misma), etc”.

Asimismo, es necesario proporcionar accesibilidad a la información y a la comunicación oral en el colegio electoral, tanto en el caso de ser un elector con sordera que va a ejercer su derecho al voto, como si se trata de un miembro de mesa electoral.

Por tanto, concluye la federación que "es necesaria la instalación eventual de bucles magnéticos, que hacen posible que la persona con sordera pueda comunicarse con los otros miembros de la mesa o con los electores. Máxime en un momento como el actual, en el que hay que tener en cuenta las barreras de comunicación que se agravan con las necesarias medidas de seguridad establecidas para prevenir los contagios, como el uso de mascarillas y mantenimiento de distancia física de seguridad, que minoran, distorsionan y limitan por ello la recepción del mensaje del interlocutor y la comunicación.

Por último recuerda que el 8% de la población tiene problemas auditivos, de distinto tipo y grado, que les plantean dificultades para entender una conversación en un tono de voz normal.