Según informan desde el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, "en general, las comunidades autónomas se mostraron conformes" con el nuevo barómetro y con su aplicación informática. Esta fue probada por técnicos de todas las autonomías durante varios meses a través del proyecto tiempos de pilotaje de la nueva aplicación.

Según sus resultados, el proceso de evaluación del grado de discapacidad tarda 5,5 minutos más de media, "sin entrenamiento previo", pero el nuevo instrumento "presenta otras muchas ventajas", indicaron desde el Imserso.

El nuevo baremo está adaptado a la nueva definición de discapacidad propuesta por la OMS, que "permitirá valorar a la persona interesada de una forma más completa, con una definición mucho más precisa de la discapacidad y con una nomenclatura compatible a nivel internacional", señalaron.

A través del BLA (Baremo de Limitación de la Actividad) el nuevo baremo facilitará "valorar conjuntamente las situaciones de discapacidad y dependencia", lo que reducirá cargas administrativas para los ciudadanos y probablemente disminuirá las listas de espera".

Además, prosiguió, permitirá una homogeneización de las valoraciones en todo el territorio del Estado e impulsar "una nueva regulación mucho más efectiva de los traslados entre comunidades".