Estos espacios, muy concurridos y ruidosos en las semanas previas y en las fechas navideñas, son entornos que pueden generar estrés a una persona con discapacidad. Centros comerciales, las calles céntricas de algunas ciudades y espacios públicos o de ocio se convierten en entornos complejos: en algunos casos porque dificultan la movilidad, en otros porque hay mucho ruido que puede dificultar la audición y en otros porque el exceso de estímulos puede causar ansiedad a personas con determinadas dificultades cognitivas, como por ejemplo las personas que sufren trastornos del espectro autista.

El Centro Español de Documentación e Investigación sobre Discapacidad (CEDID) indica que las personas con discapacidad no están en disposición de "cambiar esa situación" porque no depende de ellos. La Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Cocemfe) explica que los promotores (administraciones públicas, centros comerciales o tiendas) son lo que han de garantizar un espacio accesible e inclusivo teniendo en cuenta el plano físico, normativo, comunicativo y cognitivo en el espacio.

Por su parte, el Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) detalla que la planificación de un evento navideño, como un mercadillo, ha de contar con un Plan de Accesibilidad que tenga en cuenta unos criterios accesibilidad universal (los criterios DALCO y las normas de accesibilidad UNE 170001-1 y 2).

Para garantizar el disfrute de todos, la Confederación Autismo España precisa que en los espacios se ha de colocar señalización que permita localizar y organizar el espacio. Por ejemplo, elementos que permitan identificar las salidas o mapas para saber qué hay en cada lugar.

Hay que incluir medidas de apoyo para la comunicación social, como por ejemplo subtitulado si hay algún contenido audiovisual y otras ayudas para que todas las personas puedan participar plenamente del evento. También se debe valorar las condiciones ambientales del sitio y el nivel de estímulos visuales o sonoros (luces, sonidos…) que vaya a haber y así poder modificarlo. Por ejemplo, las personas en el espectro del autismo (TEA) suelen tener una sensibilidad sensorial aumentada y perciben algunos sonidos y luces con mayor intensidad que el resto.

En cualquier evento organizado se tienen que presentar los letreros, señalización o textos de forma clara y sencilla, aplicando la técnica de redacción 'Lectura Fácil'. Puedes encontrar más información en sus directrices o en esta publicación. Y es conveniente diseñar de forma accesible el entorno digital. Por ejemplo, si hay pantallas multimedia que estas estén pensadas para favorecer la comunicación accesible.

NECESIDADES ESPECIALES PARA PERSONAS CON TEA

Un entorno lleno de estímulos sensoriales, con multitud de luces y sonidos fuertes, puede ser ingestionable para algunas personas con TEA, que pueden manifestar un cuadro de hiposensibilidad o hipersensibilidad. Por este motivo, es frecuente que eviten eviten espacios públicos como restaurantes, centros comerciales, mercadillos o espectáculos, entre otros.

La Confederación Autismo España esgrime que los síntomas de este tipo de cuadros son malestar ante determinadas luces o sonidos de determinadas frecuencias o gamas más fuertes que pueden pasar desapercibidos o no incomodar a las demás personas; interés inusual en aspectos sensoriales del entorno. Puede ser fascinación por luces, objetos brillantes o que giran; movimientos repentinos como balancearse, girar sobre sí mismo/a o saltar repetidamente; e indiferencia aparente al dolor o a la temperatura.

En estos casos, el consejo principal sería evitar los eventos masivos, pero en caso de no poder evitarlo, puede ser útil el uso de audífonos o auriculares con cancelación de ruido que ayude a disminuir la percepción del ruido y tener localizados sitios tranquilos cerca donde poder acudir en caso de una crisis nerviosa.

PLANIFICAR UN TRAYECTO EN TRANSPORTE

Acceder a espacios tumultuosos, más aún en fechas navideñas, es más sencillo en transporte público que en un vehículo privado, sobre todo si se encuentran en el interior de las ciudades. La Confederación Autismo España detalla que en los trayectos en transporte público las personas con discapacidad, especialmente las personas con TEA, lidian con la imprevisibilidad del entorno, algo que no siempre pueden gestionar.

Por ello, es importante planificar y anticipar el trayecto, algo que facilitará la autonomía y reducirá la ansiedad. En especial, recomienda buscar previamente la ubicación exacta del evento y tener claro el horario en que se va a acudir, cuánto tiempo se necesita para llegar y qué tipo de transporte público es más adecuado según el lugar y nuestras propias preferencias.

Recuerda que las aplicaciones móviles o sitios webs de las redes de transporte público sirven de gran ayuda para acceder a información sobre horarios, rutas accesibles y tarifas de los billetes.

En momentos de mucha afluencia de personas como son los eventos navideños, puede haber cambios de última hora, como por ejemplo el cierre de estaciones de metro o el desvío de líneas de autobús. Por eso es buena idea comprobar el trayecto que queramos hacer pocas horas antes, aunque lo hayamos hecho previamente.

Autismo España recalca que es fundamental fijarse en los paneles informativos de estaciones o paradas de autobuses o trenes, donde se proporciona información clara sobre el tiempo de espera, posibles incidencias e itinerarios accesibles.

E indica que, en caso de tener una discapacidad auditiva por la que se utilice un audífono, los espacios que tengan un sistema de bucle magnético (como grandes superficies, mostradores, teatros o cines, entre otros) estarán señalizados con el símbolo internacional de discapacidad auditiva. De esta manera, especialmente en espacios ruidosos como centros comerciales o mercadillos navideños, al activar la telebobina de la prótesis auditiva mejorará el sonido ambiente.

La normativa vigente establece que los medios de transporte deben garantizar que los usuarios con discapacidad puedan viajar. Todos cuentan con un número de plazas reservadas, llamadas plazas H. Su número cambia en función del medio de transporte y su tamaño. Los autobuses urbanos tienen una superficie sin asientos donde se puede alojar la silla de ruedas. En el caso de la Empresa Municipal de Transportes de Madrid, la mayoría de los autobuses cuentan con dos plataformas en las que cabrían dos sillas de ruedas. En caso de viajar en metro, puedes consultar aquí el listado de estaciones accesibles de las redes de Madrid, Barcelona, Valencia y Bilbao. En el caso de Sevilla y Málaga, toda su red es accesible.