Según afirman los ecologistas en un comunicado hecho público con motivo del Día Mundial contra la Desertificación y la Sequía, que se celebrará el próximo domingo, l 18% de los suelos de España (9,16 millones de hectáreas) están sometidos a una erosión muy severa y el 42% del territorio español (21 millones de hectáreas) muestra una intensidad del proceso de erosión superior a los límites tolerables.

Por zonas, las más afectadas son el Valle del Ebro y la mitad sur de la península, principalmente Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Extremadura.

Los usos del suelo que más contribuyen a los procesos de desertificación son los cultivo leñosos y herbáceos de secano, por su elevado potencial erosivo; los sistemas de regadío, por el agotamiento de los acuíferos; el excesivo uso de productos fitosanitarios y abonos químicos, que contaminan aguas y suelos, y la salinización.

Otros factores que influyen en los procesos de desertificación, según la organización ecologista, son las grandes pérdidas de cubierta vegetal a causa de los incendios forestales y la concentración de actividades económicas en las zonas costeras.

Según Ecologitas en Acción, la única respuesta que el Gobierno español está dando a este problema es la aplicación de políticas sectoriales, como la hidrológica, la energética y la agrícola, "absolutamente contrapuestas a los modelos necesarios de actuación para frenar el problema ambiental más preocupante de nuestro país".