Así se pronunció en su tradicional discurso con motivo del fin de año, en el que la presidenta regional se dirigió a los madrileños desde el Parque de Bomberos de Alcalá de Henares, que este año celebró medio siglo de vida. Un lugar que eligió para agradecer "el trabajo que realizan nuestros servidores públicos" en "un año muy difícil en la lucha contra el fuego" y, en concreto, a un cuerpo que "cada día antepone su vida para salvar la nuestra".

Durante su intervención, Ayuso quiso poner de relieve las palabras del rey Felipe VI durante su discurso de Nochebuena, en las que apeló a la unidad y la convivencia, instando a participar a “todos de este gran proyecto de vida en común que es España”. Deseaba así que 2026 sea, "para los madrileños y para el resto de los españoles", un año "lleno de alegrías, nuevos proyectos, de ilusiones y ganas de construir juntos".

De ahí que, tras enumerar una serie de logros en 2025 y retos para el próximo año, la presidenta madrileña defendiese que desde la “pluralidad” es como se podrá “afrontar todo lo bueno y lo malo que esté por venir”.

“Hemos de asumir que, afortunadamente, cada persona es diferente, única, insustituible. Que solo podemos ser iguales ante la ley y las oportunidades”, remarcó Ayuso, señalando con esa última frase de forma velada al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como ha hecho en otras ocasiones ante las investigaciones abiertas que afectan a su entorno, partido y Gobierno.

"PECULIARIDADES"

Al mismo tiempo, reivindicó "el respeto por cada vida, por cada una de sus decisiones personales, por las aspiraciones y peculiaridades de cada uno". En este sentido, aseguró que la Comunidad de Madrid "es la región más viva del momento" y la que "mejor conecta las tradiciones con las tendencias, sin sectarismo, la que pone freno a los totalitarios y a las ideologías que solo sirven para dividir, enfrentar y empobrecer".

Una idea que remarcó durante gran parte de su discurso, en el que destacó que en la región viven más de siete millones de personas, además de las que se desplazan para trabajar o por turismo. Por ello, se marcó el objetivo de que "siga consolidándose como una región de aspiraciones, buenos propósitos y alegría. Que no pierda su carácter popular y callejero, social, en equilibrio".

SERVICIOS PÚBLICOS

Y para ello, ensalzó el trabajo de los servicios públicos de la comunidad para garantizar "la libertad" en la región. Eso sí, dejo claro que "para mantener los mejores servicios públicos es necesario mantener una economía fuerte, pujante" y que "llegue a todos", poniendo el foco en los autónomos, empresas familiares, jóvenes, padres en paro o jubilados: "Todos cuentan".

En esta línea, remarcó la necesidad de que las administraciones gestionen "respetando el gasto público, la economía regional y el bolsillo de los ciudadanos", poniendo a Madrid como ejemplo de "fiscalidad justa" que "alivia la carga burocrática e impositiva que sufren todos los españoles".

Así, recordó que a lo largo de esta legislatura han bajado los impuestos en 34 ocasiones, destacando sobre todo la bonificación en el de donaciones y sucesiones entre hermanos, tíos y sobrinos.

NUEVAS BONIFICACIONES

Algo que, tal y como confirmó, seguirán haciendo, pues recordó que desde mañana se aplicarán dos nuevas rebajas fiscales anunciadas en septiembre. La primera, una bonificación de hasta el 95% en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados para comercios con historia, "aquellos que tienen más de 50 años y no queremos que desaparezcan. Sin ellos, Madrid no sería lo que es", apuntó. El Gobierno regional estima que alrededor de 1.500 comercios de la región podrán acogerse a esta medida.

En cuanto a la segunda, se trata de la deducción en la matrícula de estudios universitarios y Formación Profesional "para aquellos madrileños que estudian y trabajan a la vez, especialmente los que parten de una situación económica más desfavorable". En concreto, los menores de 30 años en esta situación podrán deducirse el 50% del importe de la matrícula, con un límite máximo de 400 euros anuales por contribuyente.

A este fin se han destinado 6 millones de euros y el Ejecutivo autonómico calcula que podría llegar a unos 15.000 jóvenes.

En este capítulo de retos de futuro, Ayuso también se centró en un "problema nacional" como es el de la vivienda, el cual, dijo, "pide más oferta y libertad, más seguridad jurídica y menos burocracia para que salarios y construcción lleguen cuanto antes".

Aquí insistió en que desde su Ejecutivo seguirán trabajando "para ofrecer todas las viviendas posibles a los madrileños" y puso de relieve que "más de la mitad de las protegidas que se construyen en España", se levantan en la Comunidad de Madrid. Además, destacó algunos de los planes que están poniendo en marcha, como uno de choque "que aportará 15.000 viviendas en los próximos años".

E insistió en otros problemas generalizados, como el alquiler o la okupación, para subrayar que en la región dan "más seguridad" dentro de su "margen competencial y legislativo".

También de cara al futuro, aunque arrancaron en 2025, Ayuso señaló "dos grandes obras" que "van a transformar los servicios públicos de la Comunidad de Madrid": la Ciudad de la Justicia y la Ciudad de la Salud. De esta última destacó que "será el complejo biosanitario más importante de Europa".

"La vida es una aventura maravillosa que ha de vivirse azarosamente, libre, para darse en plenitud y que saque lo mejor de cada uno. Sin dejar a nadie por el camino", sentenció la presidenta madrileña.