Así lo aseguró el secretario de la educación pública no universitaria de la Federación de Enseñanza de CCOO, Héctor Adsuar, durante la presentación en Madrid del informe ‘Defendamos la educación pública y a sus profesionales', que recoge que en los centros públicos se han cerrado 3.490 aulas por la pérdida de 202.094 alumnos desde el curso 2017-2018 por el descenso de la población estudiantil a consecuencia de la crisis demográfica.

Para CCOO, los profesores y recursos que se destinaban a esas aulas antes de cerrarse deberían redirigirse a atender al alumnado más vulnerable y diverso, que requieren necesidades específicas de apoyo educativo. Esto incluye al alumnado con discapacidad y alumnos con necesidades de apoyo educativo por altas capacidades, integración tardía en el sistema educativo, retraso madurativo, trastornos del lenguaje la comunicación y de aprendizaje ysituación de vulnerabilidad socioeducativa. Según el sindicato, el 75% de ese alumnado está escolarizado en la educación pública y hacer de esta medida una realidad se estima que supondría la necesidad de contratar unos 34.717 docentes a nivel estatal.

La propuesta de la federación pasa por aplicar a todo el alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo lo que algunas administraciones han hecho en el pasado con necesidades especiales asociadas a discapacidad. Según CCOO "existe una gran cantidad de alumnado con dificultades que no recibe ningún apoyo extra especializado" de pedagogía terapéutica y audición y lenguaje. "Esta situación debe modificarse y asociar el alumnado con dificultades de aprendizaje a un incremento de plantilla de estos maestros y maestras especializadas", prosiguieron desde la federación que calculó que este ámbito requeriría 21.177 especialistas más.

CCOO ve necesario, además, un incremento de la red de orientación "para la buena y ágil prevención y detección de todas las dificultades y problemas, y para su seguimiento", que debería incrementarse la red de orientación en 10.026 profesionales.

A ello habría que añadir los 18.995 profesionales más para contribuir a implantar la figura del coordinador del bienestar sin recargar me más trabajo al profesorado, y que sea acorde a un profesional "cuyo perfil sería de servicios a la comunidad o de una figura análoga".

CCOO subrayó que en un aula puede haber por ejemplo, alumnos con discapacidad, con dislexia o discalculia, trastorno de déficit de atención e hiperactividad pero también escolares que por su entorno socio-cultural tienen problemas de aprendizaje por su origen extranjero y hablan otro idioma. Atajarlo, remarcó el secretario de educación pública de CCOO requiere que los profesores dediquen más tiempo para atender al alumnado.

CUATRO DOCENTES MÁS POR CENTRO

En resumen, el total en el que deberían aumentarse las plantillas docentes a nivel estatal sería, por tanto, de unos 84.915, una media de unos cuatro docentes en cada centro educativo.

CCOO también pidió más profesionales de administración y servicios, aumentando especialmente el número de enfermeras escolares, lo que supondrían 28.493 efectivos más.

El cálculo de la inversión necesaria para estas medidas, según el sindicato "es muy razonable", que supondrían una subida del 7,41% sobre el total de presupuesto educativo, un 0,70% sobre el gasto público total y un 0,33% del PIB de 2022, es decir, 4.421 millones de euros.

Según remarcó Adsuar, hay más alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo, "está creciendo, es una realidad". "La pandemia ha dejado un poso muy negativo en las dificultades de aprendizaje y en las necesidades emocionales", remarcó y recordó que el refuerzo de 33.000 profesores para bajar las ratios y garantizar la distancia de seguridad en las aulas durante la pandemia de la covid-19 es similar al cálculo de profesores previstos para apoyar a los alumnos con necesidades educativas especiales, que según CCOO deberían estar en aulas con un máximo de 12 alumnos.

"La red que está asumiendo mayoritariamente ese alumnado es la pública", remarcó, aunque matizó que hay diferencias por territorios.

EDUCACIÓN ESPECIAL

Según los últimos datos del el informe ‘Datos y cifras del curso escolar 2023-2024’, publicado recientemente por el Ministerio de Educación y Formación Profesional y recogido por Servimedia el alumnado de la educación especial aumenta proporcionalmente más que el conjunto de la población educativa, que es de 8.328.019 alumnos, un 0,2% más que un curso atrás y 18.539 estudiantes más.

Un total de 42.822 alumnos con discapacidad estudian en centros de educación especial en España, lo que supone un 4,2% más que el curso anterior con 1.716 estudiantes añadidos. Hace dos cursos, en el 2021-2022, hubo 39.885 alumnos, casi 3.000 menos.

Por tipo de centro, el 62,9% estudiaron en centros públicos y el 36,9% en centros concertados. Apenas el 0,2% hizo el curso en centros privados. Esto refleja también una mayor tendencia de las familias a escolarizar a sus hijos con discapacidad en centros concertados que la media de la población general.

Así, del total de más de ocho millones de alumnos de las enseñanzas generales no universitarias, el 67% se matriculó en centros públicos, el 24,8% en concertados y el 8,2% en privados.