“Hay 87 millones de personas con una discapacidad en la UE que esperan un trato de igualdad también para ellos. La igualdad es un objetivo que siempre estamos persiguiendo, pero las personas con discapacidad la necesitan especialmente. La idea es clara: todos los derechos, para todos los ciudadanos, en toda la Unión Europea. No puede haber excepciones”, dijo Cañas.

En este sentido, el eurodiputado de Ciudadanos y portavoz del partido de Asuntos Sociales en la Eurocámara esperó que los estados miembro trabajen rápidamente, dada la importancia histórica de esta iniciativa”. “Hay que acortar los plazos para que terminemos la legislatura en 2024 con una tarjeta real”, deseó.

Cañas también subrayó que es “clave” que los estados se comprometan con este “gran avance” e instó especialmente al Gobierno de España para que se implique “de verdad”. “Por desidia del entonces vicepresidente Pablo Iglesias nuestro país no formó parte del grupo en el que se puso en marcha el proyecto piloto que ha dado paso a esta tarjeta”, recordó.

“Perdimos aquella oportunidad, espero que ahora aceleremos. Somos un país con un gran tejido asociativo y organizaciones que son referente internacional, que han hecho grandes aportaciones a los derechos y la calidad de vida de las personas con discapacidad”, defendió Cañas.

Tras la presentación de la propuesta por la Comisión, se abre un periodo de negociaciones entre el Consejo y el Parlamento, previo a la adopción. Una vez adoptada, los países tendrán 18 meses para implementar el contenido de la directiva en sus legislaciones nacionales, según señaló Ciudadanos en una nota.

La Tarjeta Europea de Discapacidad ofrecerá una acreditación que servirá en toda la UE y permitirá a sus titulares obtener las mismas ventajas que tengan las personas con discapacidad en ese país. Por ejemplo, descuentos en los transportes o en el acceso a las actividades culturales o deportivas, información accesible, etc.

En paralelo, la Comisión Europea va a mejorar la Tarjeta Europea de Aparcamiento para personas con discapacidad, de manera que tengan derecho a estas plazas reservadas para ellas en todos los Estados. La tarjeta de cada país será sustituida por una de carácter comunitario.